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Por Robert Prat ()
Miami.- Para algunos ‘entendidos’ los Dodgers ya tienen asegurado el título de la Serie Mundial de 2025, como si el deporte fuera así de fácil, y sirviera lo realizado en 2024 y las contrataciones de los últimos meses.
Hay algo en lo que no tengo dudas: el equipo de Dave Roberts tendrá una tremenda campaña regular. Es muy posible que ganen más de 100 partidos y también que lideren la División del Oeste de la Liga Nacional y hasta que ganen el llamado Viejo Circuito.
Pero eso puede que no sea suficiente para repetir el título en las Grandes Ligas. Una cosa es ganar más partidos que el resto de los contendientes, y otra muy diferente el imponerse en el último choque, levantar el trofeo del Comisionado y colocarse un anillo más.
Lo pueden hacer todo. Si miras la nómina angelina, mete miedo desde el primero hasta el último, desde el abridor del primer día hasta el quinto, o el sexto, a todo el bullpen… se trata de tal vez el mejor equipo que han tenido en su historia.
Los Dodgers tienen una gran receptor, buenos jugadores para el infield, aunque sigue siendo el campo corto su asignatura pendiente, y también cuentan con estelares jardineros.
Pitcheo de primera y el mejor designado posible en el japonés Shohei Ohtani, todo eso a las órdenes de Roberts, que pudiera ser el lugar más vulnerable del equipo, porque a mí me gustaría ver otro timonel en el puesto de Mando. Algo así como un Tom Lasorda.
En el deporte en general, y más en el béisbol, pesan mucho los imprevistos, sobre todo en estos tiempos en los cuales los peloteros se lesionan de cualquier cosa, sobre todo porque llevan a sus organismos al límite todo el tiempo.
Los Dodgers, supuestamente, no tendrán problemas con el pitcheo. No lo tendrán desde el primer día y tampoco a medida que avanza la lid. Pueden demorar, incluso, el estreno desde el box de Ohtani, y puede que ni necesiten a un Roki Sasaki a un ciento por ciento.
Tienen a Blake Snell, a Yamamoto, Tyler Glasnow y Sasaki como seguros encargados de las aperturas. Y, por si acaso, Tony Gonsolin o Dustin May, se disputarán el quinto puesto en la rotación. Aunque habrá más competidores.
Cuando esté listo Ohtani, qué hará Robert con él. ¿Y qué hará con el veterano zurdo Clayton Kershaw? Ven lo que digo: habrá pitcher de sobra, sobre todo en la parte de alante, la de abrir. Pero el bullpen no es menos poderoso.
Y del bateo ni hablar. Sobran los grandes bateadores en la nómina. De hecho, ningún equipo en toda la MLB puede alinear en fila a cuatro o cinco de los 10 mejores toleteros de la MLB. Y si eso no es suficiente…
La competencia de los Dodgers la tendrán cerca.. En la misma división están los Padres de San Diego, que han conformado un buen equipo. Cierto que sin los nombre de Dodgers, pero una muy buena nómina, con Fernando Tatis, Many Machado, Luis Arráez…
No serán los frailes los que le quitarán el sueño a los Dodgers. O al menos no en la temporada regular. Otra cosa sería en postemporada. Y ahí entran a jugar otros equipos, entre ellos los super reforzados Mets de Nueva York.
Los Mets tiraron la casa por la ventana para hacerse con los servicios de Juan Soto y tal vez tener uno de los mejores one-two de las Grandes Ligas con el dominicano y el boricua Francisco Lindor, además de quedarse con Pete Alonso.
Y si fuera poco, tienen a Brandon Nimmo, Marc Vientos y otro grupo de jugadores que ya saben lo que es coquetear con la Serie Mundial, como ocurrió en 2024. Así que los Dodgers no podrán llegar confiados a la postemporada.
Tener una gran nómina no te garantiza llegar a la ronda por el campeonato. Los Bravos de Atlanta, otros que pueden ser contendientes, saben de eso. Durante muchos años tuvieron el mejor cuerpo de pitcheo del torneo y no lo transformaron en títulos.
Me refiero a los tiempos de Greg Maddux, Tom Glavine, John Smoltz y Steve Avery, entre algunos otros que hacían parecer invencible al equipo de Atlanta, que apenas pudo agarrar un título de Serie Mundial por entonces.
Yo sí creo que los Dodgers son favoritos, incluso para la Serie Mundial, pero el favoritismo no los hará invencibles y tendrán que pasar por dos rondas eliminatorias, que pueden ser muy difíciles, antes de pelear por el trofeo del comisionado.
En cualquiera de ellas pueden caer eliminados y convertir el «casi seguro» festejo por el título en una pesadilla, pero esas cosas las cosas del deporte.