YO TAMBIÉN PUDIERA ESTAR PRESO

Por Abel Tablada

La Habana.- Si yo viviera en San José, en San Antonio o en algún otro pueblo o ciudad o barrio menos favorecido que el mío, quizás también hubiera salido a la calle el 11 de julio de 2021.

Si yo fuera más joven y valiente, si no tuviera nada que perder, como aquellos que hacen las revoluciones, también hubiera sido apresado por expresar mi hartazgo y descontento.

Si yo, bajo el derecho constitucional, como joven cubano sin esperanzas de que mi vida y la de mis familiares y amigos mejorara, y sin mecanismos democráticos reales para cambiar la situación, hubiera pensado que protestar pacíficamente, sin asaltar ningún cuartel u organizar un movimiento armado era legal, también hubiera salido sin pensarlo dos veces como salí hace años en Bruselas a protestar por una de las tantas masacres de Israel sobre Palestina.

Entonces, ante la prolongada injusticia que significa mantener en prisión a personas, la mayoría sin cometer actos violentos, pido que liberen a todos los presos por motivos políticos, sean del 11J u otro motivo, como mismo apoyé de varias formas la liberación de Assange.

La injusticia y el abuso hacia ciudadanos cubanos practicada por el propio gobierno, son las peores armas para defenderse de las agresiones de los EE.UU y compensar lo que vendrá con la nueva administración republicana, para ganar la guerra mediática, para eliminar el bloqueo, para que el pueblo y su juventud enajenada y pensando en irse se sienta partícipe de un nuevo proyecto de país, para que Cuba pueda salir de una vez adelante.

Los EE.UU y muchos países llamados democráticos también incumplen tratados sobre derechos humanos, a pequeña y gran escala, acusan al gobierno cubano mientras entregan millones para un genocidio televisado, pero no por tamañas hipocresías e injusticias, yo como cubano, debo ignorar cuando se incumplen aquí, por un gobierno y partido que no elegí y que no garantiza, por las razones que sean, incluyendo el doble bloqueo, que mi salario de trabajador alcance para tener una vida mínimamente digna.

¿Qué hicieron los hermanos Perdomo y su madre para merecer esto? ¿Qué hicieron muchos otros que no conozco para sufrir abusos y largas penas?

Una injusticia repetida contra algunos ciudadanos cubanos no es algo menor, la falta de libertad y mecanismos de una persona para cambiar su realidad y la de su país es el reflejo de la falta de libertad de todo un país, tan importante e injusto como la falta de libertad de un territorio colonizado, de un país amordazado, agredido o invadido.

Informar primero, y si es cierto, (yo le creo a esa madre), que se haga justicia y paguen aquellos que realmente atentaron contra la Constitución, las leyes y la dignidad de los cubanos.