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WE ARE THE WORLD
Por Jorge Luis García Fuentes
Hermosillo.- Allá en Cuba les decían «los 46» a We Are The World porque, en 1985, alguien que editó y subtituló el vídeo para la televisión, hizo un conteo a dedo en la pantalla, uno a uno, para, después de nombrar a los más conocidos, rotular: «…y otros más, hasta llegar a 46».
Ahora, con el documental que recién estrenó Netflix, me asombra que esta persona se aproximó bastante, puesto que en realidad eran 47, acaso contados en algún momento en que Waylon Jennings se había ido ya, molesto porque Stevie Wonder estaba demorando la grabación, empecinado en agregarle al coro un verso en suahili que nadie quería cantar.
Además de la cuestión del título asignado por error y que quizás en la isla todavía alguien llame así —»Loj cuarentiséi»— al tema y al proyecto, fue bueno tener respuestas a dudas que ya tenían casi cuarenta años, como que Madonna y Prince no estuvieron porque no les dio la gana, que Al Jarreau cantó pasado de copas, que Bob Dylan estaba tan desorientado que Stevie Wonder tuvo que darle la melodía de su verso, imitándole el estilo…
También confirmar lo bestiales que eran los vocalistas de antes, cuando no había autotune y un grupo de estrellas se juntaron a grabar, en una sola madrugada, unos llegando directamente de un concierto, otros de la gala de los American Music Awards, todos con las voces cansadas y lidiando con sus egos en una época irrepetible.
