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Por Luis Alberto Ramirez ()
Cada año que pasa, la ciencia ficción deja de ser ficción. Un general del ejército de Estados Unidos ha sorprendido con una afirmación que no pasa desapercibida. “Vi a los soldados volverse invisibles”.
No se trata de magia, sino del resultado de una innovadora tecnología de camuflaje inspirada en uno de los animales más fascinantes del océano: el calamar.
Los investigadores de la Universidad de California, Irvine, en colaboración con el Laboratorio de Biología Marina estadounidense, han desarrollado un material flexible y elástico. Este material es capaz de adaptarse en tiempo real al entorno, enmascarando incluso la firma térmica del cuerpo humano.
“Pa’su escopeta” ¿Ustedes se imaginan que saquen a Maduro de Miraflores y nadie vea quienes lo sacaron? Jajajaja… coño apretaron.
Este camuflaje convierte en prácticamente invisibles a los soldados frente a drones y sensores infrarrojos. Estas son tecnologías esenciales para la vigilancia y detección en los campos de batalla modernos.
Un camuflaje térmico eficaz podría modificar por completo las estrategias de guerra, ofreciendo una ventaja táctica muy importante.
Equipos más ligeros, soldados más móviles y la capacidad de operar sin ser detectados por tecnologías infrarrojas podría marcar el comienzo de una nueva era en el combate moderno. Al mismo tiempo, soldados podrían sacar ratas de su madriguera sin ser detectados.