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Oscar Durán
La Habana.- No quería escribir sobre el tema porque ya estoy harto de las estupideces del castrismo. Es una detrás de otra, como si estuvieran en un Curso de Superación General Integral de sandeces. Es el cuento de nunca acabar con esta gente. Uno esperando noticias lindas para fin de año y mira ahora con lo que salen.
Si alguna ciberclaria para por aquí, díganle a sus jefes que me pongan también en esta lista. Será un honor muy grande. Claro, yo estoy en Cuba e imagino que cuando quiera ir a Matanzas, por ejemplo, inmigración de la terminal de ómnibus me impida viajar.
Seamos realistas y pongámonos serios: ¿a quién carajo le interesa si Ultrack o el Paparazzi están en una lista terrorista elaborada por el Ministerio del Interior? ¿Ustedes creen que a las familias pinareñas que perdieron todo tras el paso del ciclón y duermen mirando las estrellas, les importa saber si Otaola es persona no grata en Cuba?
La mata del terrorismo en América Latina dando cátedra ejemplarizante y haciéndose la víctima infeliz, como si las personas antes mencionadas pusieran bombas todos los días en los hoteles de Varadero o tuvieran una guerrilla en las montañas de Guisa.
Terroristas y pendejos es lo que son ustedes. Llevan un montón de años invirtiendo millones de dólares en armamento, mientras tienen a un pueblo pasando las de Caín, indefenso, por demás. Nadie va a atacar a Cuba, métanselo en la cabeza. Toda esta pantalla es porque andan al desnudo, desacreditados por todo el mundo y con el único apoyo de Ana Hurtado, siempre y cuando no tenga la menstruación.
Llama la atención, por cierto, cómo estos sinvergüenzas sacan ahora en diciembre dicho listado, en medio del escándalo por la detención de Víctor Manuel Rocha, exembajador estadounidense, quien llevaba más de 40 años trabajando para los servicios de la Seguridad del Estado cubano. Mucha coincidencia, ¿verdad?
Estén atentos, cubanos, no vaya a ser que el próximo 1 de enero se pare Raúl Castro en la Plaza de la Revolución y diga que empezará una campaña por la liberación del señor Rocha. Ya las arcas escondidas en el sótano del hospital Hermanos Ameijeiras quedaron avisadas.
Por lo pronto, en esa andamos: llamando terrorista a malanga, poniendo los nombres en una Gaceta y, de paso, engrasando cohetes y ametralladoras para mandarlos a Venezuela, porque Maduro quiere atacar Guyana.
Aparte de terroristas, son unos caras de guantes.
Foto: Richi Herrera