LA AFICIÓN DEL REAL MADRID TIENE MEMORIA CORTA

Por Yoyo Malagón ()

Madrid.- El Fútbol es ingrato y los aficionados también. Incluso los medios, a quienes los jugadores dan de comer. Basta con un año malo, con un título perdido, con unas jornadas enseñando poco fútbol y te aporrean por doquier.

El equipo de Ancelotti cayó en cuartos de Champions. El Arsenal lo sacó unos meses después de haber conseguido la decimoquinta Orejona, más del doble que el segundo club más ganador, pero eso no es atenuante. Tampoco lo es lo complicado que resulta ganar dos ediciones consecutivas.

En todo el Siglo XXI, solo un equipo ha logrado encadenar más de una Champions, el propio Real Madrid, que ganó tres a las órdenes de Zinedine Zidane, de 2016 a 2018. Tampoco es suficiente.

Para ver dos títulos consecutivos por un club, hay que remontarse al Mian AC de las ediciones de 1988-1989 y 1989-1990. Hace 35 años, pero eso no es suficiente para la exigente afición del club blanco.

En la historia del deporte resulta extremadamente complicado encontrar tanto dominio en una competición como el que ha tenido el Real Madrid en la Champions. Solo los Yankees de Nueva York en algún momento de su carrera, o los Celtcis de Boston en los años 60 del siglo pasado pudieran equiparársele al equipo blanco.

Los Bulls de Michael Jordan no fueron tan dominantes. Tampoco lo han sido los Dodgers o los Cardenales de San Luis. Incluso ni los Lakers de Los Ángeles.

No hay palmarés parecido en el fútbol

El Barcelona, por ejemplo, ha ganado menos títulos de Champions en su historia que el Real Madrid en poco más de 10 años.

Encima de eso, a Florentino, como todo buen hombre de negocios, le gusta exprimir lo que tiene y este año le pareció bien conformarse con la llegada de Endrick y Mbappé, sobre todo. Y olvidó el mandamás blanco que no había relevo para Toni Kroos o que Carvajal y Militao se habían lesionado.

A todas esas, el Real Madrid ganó la Supercopa de Europa, La Copa Intercontinental, es finalista de la copa del Rey, tiene opciones en La Liga, y aún le queda el Mundial de Clubes.

Ya sé: no ganar la Champions siempre suena catastrófico. También no remontar en casa y no mostrar ese hambre de otras ocasiones, la gallardía loca de unos jugadores tremendos.

pero no se puede ganar siempre. Hay que perder alguna vez, y tocó este año. Si el Barcelona gana la Champions, el dolor será mayor, pero esperemos que el Inter los despierte del sueño en semis, para no ver la posibilidad de un milagro en la final de Múnich.

Lo juro, yo que me creo el más forofo de todos los aficionados del Real Madrid, estoy tranquilo. El Madrid va a volver, porque los grandes de verdad siempre vuelven.

Conmigo, por cierto, que no cuente nadie para emprender una cruzada contra jugadores, el entrenador o la directiva. Seré paciente y estoy seguro de que muy pronto volverán otros títulos.