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Por Jorge Sotero
La Habana.- El exvicepresidente del gobierno Joaquín Benavides Rodríguez criticó al presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, por extender hasta 2030 el programa de estabilización macroeconómica y a su gobierno por no informar sobre la marcha de un plan económico aprobado por la Asamblea Nacional, la falta de reacción ante los déficits en la producción agroalimentaria y la inacción gubernamental ante la debilidad del peso frente al dólar y el euro.
En el Período Especial (crisis económica por el derrumbe del comunismo) se logró la estabilización macroeconómica en tres años, recordó Benavides, quien calificó de “excesivo” el nuevo plazo de seis años, establecido por el mandatario en una entrevista reciente con Ignacio Ramonet.
“¿Cómo están las tareas que corresponderían a este año? ¿Va a continuar el silencio como respuesta? ¿Será que no percibe nuestro gobierno el nivel de insatisfacción que hay en la población por la falta de información concreta de la estrategia para salir de la crisis? ¿No se da cuenta que está perdiendo la batalla política en la calle, sobre todo con la población de más de 50 años?», cuestionó Benavides en el blog Cuba y Economía.
Del programa propuesto por el primer ministro y aprobado en la Asamblea Nacional, “nada se ha informado”, alertó.
“Continúa sin enfrentarse seriamente el grave problema de la producción de alimentos por nuestros agricultores”, pese a que el presidente Díaz-Canel, incrementó sus visitas a los municipios agropecuarios, donde “descubre iniciativas y posibilidades” y da a entender que deben extenderse al resto del país, como divulga el noticiero, añade Benavides, que pregunta por cuáles son esas experiencias exitosas y en qué consisten.
Lea el artículo acá: https://cubayeconomia.blogspot.com/2024/06/han-transcurrido-150-dias-del-2024.html
En paralelo, el viceprimer ministro Jorge Luis Tapia sostiene reuniones con autoridades municipales y agricultores, describe el ex alto funcionario, que identifica a Tapia como el autor de 73 medidas para impulsar la producción agroalimentaria, pero que “la mayoría de los agricultores del país nunca supieron lo que había que hacer para que dieran resultados”.
El gobierno insiste en la bancarización, mientras los agricultores se quejan de que no la entienden, Transfermóvil no les funciona y tienen dificultades para extraer su dinero del banco para pagar salarios a sus trabajadores, sostiene Benavides.
“Da la impresión (…) de una aplicación incoherente de la política con los agricultores”, subraya quien también fue Presidente de la Comisión Nacional del Sistema de Dirección de la Economía, entre 1986-1991.
Pasados 150 días de 2024, Benavides critica la falta de agilidad de la política económica en “establecer una tasa de cambio oficial para toda la economía”, y acordar un precio pagado en cash a los agricultores, dejándoles vender libremente sus excedentes “sin persecuciones”.
El Ministerio de la Agricultura deba dejar de “atosigar” a los productores y permitirles producir, “sin estar amenazándolos con quitarle el usufructo de las tierras entregadas legalmente por el Estado”, advierte Benavides, que también critica al gobierno por no aprovechar la caída del dólar en el mercado informal y no animar la participación de los bancos en las negociaciones entre autoridades municipales y productores agropecuarios sobre precios, para acordar créditos sujetos al cumplimiento de las producciones.
Los agricultores y ganaderos “deben poder extraer libremente el dinero depositado en sus cuentas bancarias, para enfrentar sus pagos y comprar divisas para invertir en maquinaria e insumos”, precisa.
Estas son la experiencia mundial, también la vietnamita, la de Laos y de China; y no se debe seguir aplazando más en Cuba porque “no tengo dudas de que salvara a nuestro socialismo, sin renunciar a los principios que Fidel (Castro) defendió en La Historia me Absolverá, concluye Benavides, que también fue ministro de Trabajo y Seguridad Social y jefe del departamento Económico del gobernante partido comunista.