EL VERDADERO DOLOR ES INDECIBLE
Por Adalixis Almaguer ()
Miami.- “El verdadero dolor es indecible. Si puedes hablar de lo que te acongoja estás de suerte: eso significa que no es tan importante. Porque cuando el dolor cae sobre ti sin paliativos, lo primero que te arranca es la palabra.” (Rosa Montero, La ridícula idea de no volver a verte).
Un hombre llegó al hospital con su hijito, con asma su niñito, con asma pero vivo.
En el hospital no había corriente. Ni había corriente, ni había vergüenza, ni había la dignidad en cuadritos que venden a plazo los obesos del Pececé. Su niñito murió.
No tengo palabras que puedan decir lo que esto me hace sentir. No sé como se dicen estas cosas y seguir siendo madre, y seguir siendo humana.
Me tejo la tristeza. No sé como vivir estos días, estas cosas.
PD: he oído mucho decir: despierta que mañana puede ser tu hijo. Pero no, no necesitamos otro niñito muerto. Ni el tuyo, ni el mío, ni el de nadie. Este niñito era la luz de los ojos de su padre, que lo sacó muerto del hospital, envuelto en una colchita y apretado contra su pecho, que no lo pudo acostar en el carro fúnebre porque el corazón no lo dejaba separarse de su hijito. ¡Ya basta!
