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Por Yoyo Malagón
Sevilla.- Si eres de los que crees que 20 años no es nada, como el viejo tango porteño, lo pensarás mejor cuando de 40 primaveras se trata. Y esas tuvo que esperar el Athletic Club de Bilbao para volver a ganar un título de Copa del Rey, una lid en la que se ha impuesto en 24 ocasiones.
Parecía que no iba a llegar nunca la posibilidad de volver a ganar. Incluso, al final del primer tiempo había temores acá, en la grada, porque el Mallorca del Vasco Aguirre iba arriba por 1-0, gracias a una diana al minuto 21 de Dani Rodríguez.
Hasta Ernesto Valverde tenía sus dudas. Nada más comenzar la segunda mitad mandó a calentar a varios jugadores, con la intención, al parecer, de hacer cambios en busca de, al menos, un empate que le permitiera seguir con vida en la Copa, pero Sancet, al minuto 50, se encargó de devolverle la tranquilidad al técnico del Athletic.
Más calmado, porque al menos había igualado, Valverde aguantó los cambios, el partido entró en fases intensas, a veces bruscas y se escurrió más allá del minuto 90, con oportunidades para uno y otro de sentenciar, aunque, para decir verdad, la claridad en el juego se había perdido, porque el título en juego parecía pesar demasiado.
La prórroga también fue intensa. Hubo cabezazos, encontronazos, balones peleados hasta el extremo, todo con la intención de no ceder ante un rival que cada vez vendía más cara la derrota, pero también se escapó la prórroga y a decidir por penales.
Los que creían que el Mallorca, que en semifinales dio una lección desde los 11 pasos volvería a ser implacable, se equivocaron, porque fueron los bilbaínos los que estuvieron impecables, con cuatro disparos y cuatros goles, mientras los del Vasco Aguirre, de familia vasca que apoyó al Athletic, erraron en dos ocasiones.
La grada, la parte del Athletic, disfrutó hasta el éxtasis la victoria. Hubo saltos, gritos, y mucha emoción y llantos entre los seguidores del campeón, quienes tuvieron que esperar 40 años para levantar una copa de nuevo.
El Athletic es campeón y esa espera de 40 años se borró de un plumazo. Desde ahora, hay que comenzar de nuevo las cuentas, porque esas cuatro décadas ya forman parte del pasado y el segundo equipo con más títulos de Copa del Rey, vuelve a ganar.
¡¡Enhorabuena, campeones!!