¿EL HOMBRE PIENSA COMO VIVE?

Por Manuel García Verdecia ()

Holguín.- Sucede que constante e irreflexivamente se repite la frase, El hombre piensa como vive. Con esto se quiere hacer notar el modo en que las condiciones materiales de la existencia modelan la forma de pensar. Sin embargo esto no es absoluto ni constante. Por supuesto que en determinados períodos o situaciones y, sobre todo para ciertos grupos de personas, el modo de vida hace que se adopte una determinada forma de pensar.

No obstante, eso no fundamenta que siempre el modo de vida preceda al pensamiento. Si fuera una constante, el hombre no hubiera salido de la caverna pues al tener refugio, calor y seguridad, se hubiera habituado a pensar como cavernícola.

Esto niega la dialéctica entre ambos aspectos, el modo de vida influye en el modo de pensar, pero a su vez el pensar incide en el modo de vivir. Ya Descartes decía, Pienso por consiguiente existo. O sea, como ser humano al pensar creo una existencia según mi manera de entender la vida.

Los grandes adelantos culturales y espirituales de la humanidad se concibieron en la mente mucho antes de concretarse en la práctica. El pensamiento productivo provocó los grandes cambios en la vida de las personas. Eso no hubiera sido posible si se hubieran habituado a no salir del marco de pensamiento diseñado por el modo en que vivían, de forma que hubieran vivido en una eterna y única forma de vida que se repetiría ad eternum.

Pero como el ser humano es creativo inconforme, desarrolló un pensamiento no rígido ni cerrado, sino flexible y abierto que le ha permitido las grandes conquistas materiales y espirituales de que goza.

Pero, insisto, los amaestrados y los tontos no quieren salir de su pequeña vida. Solo los auténticos seres creativos piensan denodadamente para forjar la vida que se quieren dar, rechazando la que sus circunstancias le quieren imponer. Aun en las peores situaciones (léase a Viktor Frankl) los que piensan mejor, viven mejor, según sus facultades y anhelos.

¿Acaso como nosotros estamos viviendo en un contexto de pobreza y penuria, se supone que debemos pensar pobre, precariamente? Creo que por el contrario hoy más que nunca se impone un pensamiento riguroso y productivo a ver si acabamos de salir del ciclo de desaciertos y escaseces.