EL EDIFICIO MÁS GRANDE DE CUBA

Madrid.- El ciberclariato ya no sabe qué hacer para meternos la Torre K por los ojos. El grupo Fotos de La Habana, convertido en una sucursal del jodido edificio no para de publicar imágenes y alabanzas a ese esperpento.

A estas alturas, los que miramos con los ojos de la cara, hemos dicho de todo menos lindo a ese edificio. Pero hay una cosa que me gustaría aclarar. Sí, la torre K puede considerarse un rascacielos.

No existe una definición universalmente estricta de qué es un rascacielos. La definición más exacta que he encontrado la da el Council on Tall Buildings and Urban Habitat (CTBUH). Un rascacielos es generalmente un edificio de más de 150 metros de altura (aproximadamente 50 pisos).

La Torre K, con sus 154 metros, entra en esa categoría.

Algunas clasificaciones adicionales incluyen:

— Edificio alto: entre 35 y 100 metros de altura. (Todas las torres del Vedado).

— Rascacielos: a partir de 150 metros de altura.

— Supertall: edificios que superan los 300 metros.

— Megatall: edificios de más de 600 metros.

Aunque el término se usa a menudo de manera flexible, 150 metros es un umbral comúnmente aceptado para empezar a usar la denominación de «rascacielos».

Y dicen las ciberclarias: ¡OMG! ¡OMG! Tenemos un rascacielos, ¡UNO!

El segundo edificio mas alto de Cuba, el Focsa, con 130 metros no llega a ser considerado rascacielos pero en su momento fue el edificio de hormigón armado más alto del mundo. Su proyecto fue concebido y elaborado 100 por ciento por ingenieros cubanos. Contaba el profesor ingeniero Babé, que el American Concrete Institute desaconsejó la construcción del edificio en hormigón, ellos proponían acero como era común en Estados Unidos.

Finalmente, se construyó en hormigón armado y se demostró no sólo la factibilidad de este tipo de material en la altura sino que fue más barato e igual de veloz. Es de destacar el nivel de la escuela de ingeniería cubana. El Focsa es una ciudad en si misma que integró ya hace setenta años viviendas con restaurantes, clubes, tiendas y estudios de televisión.

La Torre K, llega con ciento cuarenta años de atraso. En 1884 comenzó en Chicago la carrera de loa edificios en altura y ya en 1930 habían decenas de rascacielos en Estados Unidos. Hoy, cualquier ciudad latinoamericana, africana, y no hablemos de Asia, cuenta con decenas de rascacielos. Construir un rascacielos hoy tiene la misma connotación que viajar de Europa a América en un avión o comunicarse por teléfono.

En cuanto al proyecto de la Torre K, es conocido el apego del gobierno cubano por lo extranjero. ¡Ay como me gusta los yumas! La Torre K arrastrará la deshonra de su nacimiento turbio de por vida. Creado de un anteproyecto europeo que en nada se adapta al trópico y un proyecto ejecutivo elaborado en Cuba como mano de obra barata. La Torre K, con su función hotelera, se encierra en si misma. Diseñé y construí hoteles en Cuba, sé muy bien cómo se construyen barreras arquitectónicas para mantener al cubano de a pie lejos, fuera, ausente de esos lugares.

Siendo así, la Torre K puede ser el edificio más alto, pero el Focsa sigue siendo una edificación mucho más grande en la ciudad.