¿RESISTENCIA Y CREATIVIDAD? SÍ, PARA QUE USTEDES SE BENEFICIEN

Por Jorge Menéndez ()

Cabrils.- Miguel Díaz-Canel alardea de conversar e intercambiar con su pueblo en busca de soluciones a los graves problemas de la economía del país, que sufren la mayoría de los cubanos, casi sin excepciones.

Habla de desterrar el acomodamiento, la burocracia y la ineficiencia. Y en la misma línea va Manuel Marrero, el primer ministro y paladín de todo esto, cuyo hijo alardea de viajar en jets privados, y que ha tenido no sé cuántas mujeres 30 años más jóvenes que él.

Llevamos 65 años con un gobierno que lo quiere controlar todo y no controla nada. Seis décadas y media sin que asuman la responsabilidad del caos que ha creado su ineficiente sistema, que mete las narices en todas partes y solo crea miseria.

A lo que dice Marrero, Canel añade aquello ridículo de la ‘resistencia creativa’, algo totalmente imposible en un país cuyo aparato estatal controla lo que comes, lees, en lo que crees, y todo sin rechistar, aunque tampoco garantizan salud, medicinas, transporte… Entonces el postulado del ahijado de Raúl Castro solo sirve como justificación para su desgobierno.

Jamás, en 65 años, el gobierno cubano asumió la responsabilidad por ninguno de los caos que ellos mismos crearon con su ineficiencia. La culpa siempre la tienen otros, bloqueo incluido.

Solo hay dos cosas para las que el gobierno cubano es eficientes: crear miseria como ningún otro país en el mundo y explotar a sus conciudadanos, estén donde estén.

Me refiero a los cubanos de adentro y de afuera, médicos, deportistas, tabacaleros trabajando de sol a sol y, por supuesto, al chantaje emocional utilizado por la cúpula para desplumar a los que trabajamos en el extranjero para vivir con dignidad y poder ayudar a los nuestros. Esa es la ‘inteligencia creativa’ -o resistencia- del gobierno, el desplume de su gente.

Para conseguir sus objetivos utiliza a empresas estatales, como Etecsa, que es una máquina de imprimir billetes, tanto en Cuba como en el extranjero, con sus dichosas recargas y su pésimo servicio. Después publica que la empresa está en pérdidas porque, mediante fraude, le roban el dinero. Una historia vieja que hace 65 años conocemos.

Existe, además, un ejército de individuos, todos hijos de papá y mamá, o simplemente «confiables», que se montan empresas turísticas (como el  hijo de Eusebio Leal, por ejemplo) y venden paquetes turísticos a medida: alquiler de coches, excursiones, discotecas, e incluso asumen la representación de líneas aéreas, asegurándose el billete.

Hay otras, tipo «Ven a Cuba», capaces de «alquilar» un piso enorme a 20 metros del Paseo de Gracia, de Barcelona, que se especializa en el envío de paquetes y la gestión de la documentación necesaria para nosotros, los cubanos de afuera.

Los precios allí se negocian y ¿qué significa eso? Les cuento: si usted necesita una inscripción de nacimiento, son 50 euros, pero… ¡Sorpresa!… cuando va a buscarla, le piden 40 euros más, porque resulta que no estaba digitalizada en Cuba y el personal tuvo que digitalizarla. Seguramente entra allí el precio del café y los cigarros que disfrutaron durante la digitalización.

(Zona Especial de Desarrollo del Mariel)

Les cuento más: ¿Dónde creen ustedes que se promocionan los servicios de esta empresa? Efectivamente, en el consulado cubano. Aquí tienen un ejemplo claro y caro de los encadenamientos productivos y la inteligencia creativa de Canel y sus secuaces.

Existen, además, empresas de recargas en connivencia con Etecsa, quizás una de las empresas que más se beneficia de nuestras desgracias. Empresas de captación y envío de dinero, de logística, todas en un país muerto de hambre, que le garantizan a sus familiares la comida en 24 horas en la puerta de su casa. Aún así tenemos que escucharle a Canel que  tenemos que «guapear la comida».

Esas son las soluciones del gobierno cubano, sacarnos hasta la vida y el dinero para ellos.

La otra vertiente son los grandes negocios con extranjeros, de los que tenemos prohibido participar.

¿Alguien me puede decir de algún beneficio palpable para el pueblo cubano con las decenas de empresas radicadas en el Mariel? Con uno que mencionen me conformo.

Eso nos demuestra la responsabilidad verdadera del gobierno cubano para con nosotros. Soluciones cero, dinero para ellos.