Por Esteban Fernández Roig
Miami.- Soy de ahí, del archipiélago que Dios se esmeró en hacer, dibujar, en pintar de verde y azul, y que el Diablo se encarnó en destruir y pintar de rojo.
Soy de un lugar lleno de palmares y cañaverales, de ríos y de mares, de tocororos, tomeguines, azulejos y canarios, soy de la tierra de los hermanos Maceo hijos de una anciana mulata llamada Mariana quien no tuvo reparos en que “con el filo del machete” intentaran liberar a mi nación.
Soy de un punto prodigo en mangos, mameyes, ciruelas, guanábanas, caimitillos, papas, mamoncillos y marañones, soy perteneciente a la parte buena de mi pueblo que adora a Jesucristo, que solo se arrodilla ante Él y que muchos han sido fusilados dándoles Vivas. Soy de los que odia a los que la esclavizan.
Soy de una Isla con el sol mas radiante, con el cielo mas azul, con aguaceros, y con las playas más bellas; tuve la dicha de bañarme en el río Mayabeque y en las Playas Varadero, Guanabo y Santa María del Mar, y hasta pude disfrutar del fango medicinal de la Playas del Rosario y de Caimito.
Soy admirador de los creadores de los mejores ritmos que ha dado la humanidad, me crie escuchando mambos, son, rumba, casino, guaguancó y danzón, vi a dos ancianos argumentando mediante puntos guajiros en una loma aledaña, con cierto desagrado vi peleas de gallos en la Valla la Guajira , y a Vicentico Valdés cantando «Los aretes que le faltan a la luna»…
Pude aplaudir durante más de 60 años a una reina negra cantado “Songo le dio a Borondongo” y gritando ¡Azúcaaaaaa!
Soy de donde se formó un titingó, donde todo se acabó como la fiesta del Guata´o y donde corrieron los liberales del Perico, soy de uno de los primeros lugares del universo que tuvo televisores a colores, soy de donde un brillante médico llamado Carlos J. Finlay descubrió el agente transmisor Aedes Aegypti de la fiebre amarilla.
Soy de ahí, de la tierra que parió al Apóstol José Martí, donde un dominicano llamado Máximo nos ayudó a liberarla, un Che más tarde la ensangrentó y una Lina trajo a dos monstruos al mundo.
Soy de la calle Pinillos, mudado al Residencial Mayabeque, de los parques Martí y Central, fui bautizado en la gloriosa Parroquia de San Julián de los Güines, soy del interior de la República, y pisé la tierra colorada de los campos del Valle donde abrí los ojos al planeta. Vi un gallo cantando encaramado en un tractor y un sinsonte revoloteando a mi alrededor.
Soy un orgulloso cubano de nacimiento y americano de adopción, adoro y añoro a mi patria Cuba, y defiendo hasta con las uñas la libertad de la nación que me ha brindado refugio.
Soy un güinero, conservador, veterano en el Ejército norteamericano para liberar a mi tierra natal.
Soy, según un navegante genovés, nacido en la “tierra más hermosa que ojos humanos han visto” y añado que estoy en el país mas hermoso, próspero y generoso del mundo.
¡Gracias Dios Mio, si vuelvo a nacer deposítame en el mismo lugar, dame la dicha de volver a nacer en la Isla Juana y de nuevo permíteme siempre visitar constantemente a mi segunda patria, la adoptiva y gloriosa USA.
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