PINCHO GUTIÉRREZ: EL BATABANOENSE QUE ENTRENÓ A KID CHOCOLATE

Por Juan Carlos García Guridi ()

Bejucal.- Muy poco se habla de Luis Felipe Gutiérrez, o mejor, Pincho Gutiérrez… Pues como carta de presentación les diré que fue un famoso entrenador de boxeo, que tuvo en su esquina a grandes pugilistas como Black Kid («el relámpago sagüero), el panameño Al Brown y al mismísimo Kid Chocolate, de quien fue mucho más que su entrenador.

En su libro biográfico EL BOXEO SOY YO el “Kid” reconocía: “¿Pincho, mi amigo…? No, mucho más que eso, mi hermano, mi padre. Y lamentaba: “¡si le hubiera hecho caso! Por él fue que llegué”. Y como si fuera poco se dice que en algún momento entrenó a otro grande, el popular Niño Valdés.

Pincho era todo un personaje… Practicó boxeo, baloncesto, jabalina (de ahí su apodo) y remos; deporte este último en el que llegó a competir junto a Julio Antonio Mella en la canoa del Centro de Dependientes, y más tarde con los Caribes de la Universidad de La Habana. Tras retirarse del deporte activo fungió como comentarista, escritor, promotor, manager, funcionario y hasta dirigente.

Natural de Surgidero

Pero lo que no saben muchos es que Pincho era natural de Surgidero de Batabanó y su padre era dueño de una flota pesquera. O sea, que provenía de una familia acaudalada. Su padre lo envió a estudiar a los Estados Unidos y fue allí donde se ligó definitivamente al deporte, a lo cual le dedicó el resto de su vida.

Pincho Gutiérrez era un hombre de espíritu inquieto. Más que eso, era el clásico pendenciero, llegó a ser conocido como «el loco del café El Pueblo «. Irreverente y polémico, se comenta que cuando no tenía problemas se los buscaba… Fue además revolucionario, llegando incluso a guardar prisión. Cuando en 1929 Kid Chocolate derrota al norteamericano Al Singer, Gerardo Machado los invita a él y a Kid a una cena, y no asisten, en clara demostración de inconformidad con la gestión del presidente.

Lamentablemente en Batabanó nadie lo recuerda; irónico resulta que en la década de 1960 en Cabaiguán inauguraran un ring con su nombre (ya no existe). Ser el entrenador de Kid Chocolate es aval suficiente para que se le recuerde.

Con Kid se enroló en 1928 pero ya contaba con reconocido prestigio. No necesitaba del boxeo ni de ningún otro deporte o sacrificio para vivir, sin embargo ya vieron, era un hombre con inquietudes y ambiciones. De manera repentina murió a los 57 años, el 14 de enero de 1957, en su casa del Reparto Almendares, a causa de un paro cardíaco.