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Por Manuel Viera
La Habana,. Después de ultrasonido, Rayos x y test de sangre el diagnóstico de la niña es el de un dolor agudo producido por una adenitis mesentérica, o sea los ganglios linfáticos del abdomen inflamados como resultado de alguna infección.
Agradezco el apoyo de cientos de personas que se han ofrecido a ayudar, en especial de Miladis (la pinareña) y del doctor. Realmente me he emocionado… de verdad que los cubanos somos únicos en el mundo en eso de solidarizarnos y apoyar al prójimo. Deberíamos de aprender a canalizar todo ese amor y unidad también en procuraremos felicidad y bienestar.
Es muy triste lo que estamos viviendo. Es muy triste ser padre o madre hoy en Cuba. Es muy triste enfermar y saber que puedes morir de cualquier cosa, porque si no buscas alternativas y mueves cielo y tierra puedes morir hasta de una apendicitis.
En Cuba hoy tenemos nuestras vidas y las de nuestros seres queridos pendiendo de un hilo y de la muerte nos separa apenas una delgada línea.
Vivimos los cubanos de la isla tal cual si no hubiésemos evolucionado bajo las leyes de Darwin, los más fuertes sobreviven y los más débiles pueden morir hasta de un catarro.
Cada día me decepciono más de toda esta mierda, cada día se me hace más insoportable el discurso, cada día se me hacen más insoportables los inútiles que sacrifican a millones por algo tan absurdo como una ideología que solo a ellos proporciona bienestar, poder y riquezas.
Cada día me convenzo más de que solo hay dos caminos: o barrer el comunismo y a los dinosaurios de Cuba o emigrar de ella.
Si al final desisto de esta lucha ante la inmensa capacidad de tolerar, ante el miedo y la pasividad de las mayorías y llegara a Miami que los globos no sean de corazones, que tengan forma de gusano, porque seguiré siendo tan gusano y tan anticomunista donde quiera que me encuentre.
¡Cuba merece ser libre y los cubanos merecen ser felices!