MÁS ALLÁ DE IRON MAN

Por Pucho Oroza

Varadero.- Cal Ripken Jr es uno de esos peloteros que por derecho propio fue exaltado al Salón de la Fama en 2007. Solamente con su legendario récord de juegos consecutivos (2,632) superando a Lou Gehrig, creo le hubiera bastado, pero, aún así, tuvo aval más que suficiente.

En 1983, logró dos cosas que nadie había hecho en la historia de Las Grandes Ligas: Jugó todos los innings de la temporada regular y de la postemporada. El torpedero de Baltimore participó en los 162 juegos de la temporada y los nueve innings de cada juego, también jugó todas las entradas de los cuatro choques que duró la Serie de Campeonato y todas las capítulos de los cinco de la Serie Mundial que terminó ganando ese año.

Además, Ripken Jr, ganó el MVP de la Liga Americana ese propio año 1983 y se convirtió en el primer jugador en ganar en años consecutivos el premio al Novato del año y el MVP, con la excepción de Fred Lynn que obtuvo ambos Premios en la misma temporada.

En ese mítico año para Cal Ripken Jr, el ídolo de Baltimore se convirtió en el segundo shortstop de la historia con una temporada de más de 100 carreras anotadas, más de 100 impulsadas, más de 25 jonrones y 45 dobletes, más de 200 hits y un promedio superior a los .300, el otro, Robin Yount un año antes.

Cal, disparó 3 mil 184 hits en su carrera, siendo uno de ocho peloteros con 3 mil imparables y 400 homeruns y se ubica en el puesto 16 de indiscutibles en la historia de la MLB, además, fue tres veces líder en WAR en su Liga, dos veces lider en OWAR y cinco veces líder en WAR defensivo, con la cifra de 8214 asistencias, se ubica tercero de por vida en este renglón, habiendo sido siete veces líder en asistencia.

Ripken jr fue seleccionado en 19 ocasiones para el Juego de Estrellas, Campeón de la Serie Mundial, dos veces MVP de la Liga Americana (1983, 1991) , Novato del año de la Liga Americana (1982), dos veces ganador del Guante de Oro , ocho ganador del Bate de Plata y Ganador del Premio Roberto Clemente, entre otros muchos Premios y distinciones.

Sin dudas, la historia y el legado de Cal Ripken jr va más allá de su impresionante salud de hierro, constancia y amor al juego. Un inmortal de Cooperstown justo y emblemático.