Por Manuel Viera ()

La habana.- Siempre con la misma tontería del carácter comercial, como si una medicina, traída y vendida por un particular, no salvara más vidas que la que no hay en la farmacia del Estado siempre vacía y llena de viejitos y enfermos que apenas duermen esperando a que traigan algo para curar sus enfermedades.

Soy ciento por ciento partidario de que se apruebe la comercialización de medicamentos como actividad privada, sin que por ello deba desaparecer la farmacia estatal, y que sea una actividad sujeta a requisitos, como la prescripcion médica, tal como se hace en todo el mundo normal.

Ahora es ilegal y no por ello no se hace. Claro que de forma descontrolada, desrregulada, insegura, y sin aportar un solo peso al fisco, algo que es realmente ilógico.

Es irónico que un privado pueda importar un contenedor de whisky o de cerveza para venderlo sin control alguno, lo mismo a un adolescente que a un diabético y que, por otra parte, no se pueda importar un contenedor de medicamentos porque su comercialización no está aprobada… ¡algo dinosauriamente absurdo!