
LAS MULAS TUMBARON A GAESA Y MARRERO CUQUEA EL 11J
Majadahonda.- La anunciada dolarización ¿parcial? de la economía confirma que las mulas tumbaron a Gaesa el negocio de las remesas y el perico salió a llorar ante la Asamblea Nacional, donde rozó el ambiente previo al 11J, anunciando más restricciones; como si los cubanos no llevaran soportando un genocidio desde el otoño de 2019, cuando se inauguró la resistencia creativa.
La presencia de Raúl Castro en el plenario es un respaldo a lo anunciado, que es una vuelta atrás casi completa a enero de 2021, cuando reapretaron la soga y los empobrecidos se hartaron. Pero es más un guiño a la cúpula que al pueblo, porque la gente no cree en Raúl ni en ninguno de sus criados, solo en lo que es capaz de resolver por si misma, y punto.
Todos estos aspavientos, que serán aplaudidos convenientemente por la mayoría de diputados, que luego harán lo más conveniente para sus bocas; forman parte del viejo retozo comunista de intentar postergar las imprescindibles reformas estructurales que exige el empobrecimiento combatiente de la nación, con uno de los mayores capitales humanos de la región.
Si el comunismo es tan eficaz y el capitalismo tan ruinoso; ¿cómo se explica que los cubanos sean eficaces y prósperos en libertad y mendigos bajo la bota verde oliva?
Limitar en número y cantidad las recargas telefónicas en pesos cubanos, demuestra que están babeando pavlovianamente por los dólares estadounidenses y contradice la idea primigenia de reordenación monetaria para fortalecer el peso cubano, anunciada a bombo y platillo, pero que parió tres monedas dispares e injustas.
Aquella estampa de Díaz-Canel advirtiendo que las ventas en CUC no se eliminarían es impagable. ¡Que visión, cuanta certeza, que manera de generar confianza en los consumidores y actores económicos, que es el penúltimo invento del diccionario metatranquiano.
Obviamente, las recargas en pesos cubanos no cubren costes de Etecsa y como ya Gaesa perdió el monopolio de las remesas; ahora solo falta que los guardias también pierdan el tumbe de los móviles, que llegará con el acceso a Starlink y la generalización de números extranjeros gozando en La Habana; vía satélite
Más de lo mismo, el mundo viaja a 5G y los piratas del Caribe pretendiendo que asuma su paso de buey cansado. En cualquier momento, algún papagayo asalariado de la casta, promueve las ventajas de la informática a pedales para sabotear el neocolonialismo tecnológico imperialista.
Subsidiar a necesitados -que en Cuba son olas- y no a productos es una buena práctica económica, pero ignora la complejidad de las relaciones mercantiles entre privados, que incluye el trueque y la reventa de productos de primera necesidad.
Los compradores de productos subvencionados optarán por vender una parte a precio real y fuera catarro, porque el subsidiado necesita ingresos para pagar otros gastos. Y no es que los cubanos sean malos ciudadanos o amantes de la ilegalidad y el trapicheo; es lo que han aprendido en 65 años de dictadura, donde cada trámite cuesta un dineral y lo único que funciona es actuar por la izquierda o robarse una carretilla de yuca o de lo que sea, mientras un policía sanciona al vendedor.
El tardocastrismo ha convertido a Cuba en el velero del capitán Benito Cereno, novela de Hermann Melville, donde la escasez de agua y comida, en medio de una calma chicha en el Pacífico, sublevó a la marinería.
Marrero -que se pone tierno cuando suelta boberías solemnes- advirtió que está vez no habrá marcha atrás. Como la gente se bote otra vez para las calles, el retroceso será supersónico porque el miedo cambió de bando y muchos cubanos se han desentendido del estado, en reciprocidad al abandono que padecen.
El dinero es lo más cobarde del mundo y muchos pequeños y medianos empresarios llevan años depositando la moneda dura en bancos extranjeros y dejando lo mínimo en sus cajas y cuentas cubanas para evitar quedarse Serapios cuando llegue el Armagedón.
Del frente eléctrico, mejor no hablar. No viene al caso, ya el ministro dijo que seguirán remendando termoeléctricas y mintiendo con la energía solar, que exige una inversión que no tiene la cucaracha sentada; asi que olvide a esa Martina, que nunca lo quiso.
Trump ya viene llegando y, si cumple lo anunciado, pondrá sabroso al tardocastrismo con miles de deportados encabronados en la esquina de Coppelia; un potencial levantisco al que la casta verde oliva y enguayaberada teme como a un viento de galerna entrando por el Morro.
De ahí los pronunciamientos de la cancillería suplicando: Trump, yo soy tu amigo…
Si todavía alguien duda de las malas intenciones de la casta verde oliva y enguayaberada, solo debe leer el siguiente lead de Granma. Guárdenlo, porque la memoria es frágil y luego no aparecerá el periódico ni en los baños de las minipymes:
«A un año de la implementación de las proyecciones de gobierno para corregir distorsiones e impulsar la economía, si bien se muestran discretos resultados, existe la insatisfacción de que no se ha avanzado en los aspectos de mayor impacto en el pueblo, aseguró el diputado por el holguinero municipio de Gibara, Manuel Marrero Cruz, primer ministro de la República y miembro del Buró Político del Partido».
Un año y siguen en el patiñero, pero con ciencia ficción, resultados discretos ¿cuáles?; existe la insatisfacción, ¿cuál de ellas? ¿Los insatisfechos son los dirigentes, sus víctimas, sus cómplices? Que el primer ministro imite a Cantinflas, vale, pero que el órgano oficial del pan con na, deambule en el disparate, es más grave porque se trata de la desgracia de nueve millones de cubanos.
La sesión parlamentaria cerrará sin una buena noticia, pero nos deja los afanes improductivos del Trucutuerca de Gibara, servil con los poderosos e injusto con el resto de los cubanos.