La farsa del “Dictador Designado” Díaz-Canel en un pueblo cubano

(Tomado de La Tijera)

Durante una visita de Miguel Díaz-Canel a una comunidad rural, un campesino se le acercó y le dijo:

“Compañero, en este pueblo tenemos dos grandes problemas”.

El títere de la dictadura le preguntó cuál era el primero, y el guajiro respondió:

“Hace rato no tenemos médico en esta comunidad, el último se lo llevaron de misión para Italia”.

Díaz-Canel, haciendo su habitual teatro, se apartó, sacó el celular, hizo una llamada y regresó con cara de optimista diciéndole:
“mañana llegan un médico y una enfermera de la cabecera de provincia”.

Pero al preguntar por el segundo problema, el campesino lo dejó en evidencia:

“Aquí nunca hemos tenido red celular para poder comunicarnos…”.

Una escena que retrata con ironía el atraso y la mentira oficial en la Cuba saqueada y sin soluciones reales.