INVESTIGAN TIROTEO Y MUERTES EN ESCUELA DE WISCONSIN, EEUU

Nueva York.- Los investigadores están tratando de averiguar este martes por qué una adolescente abrió fuego en la escuela cristiana en Wisconsin, a la que asistía, en un hecho que provocó la muerte a un profesor y una alumna.

Seis personas resultaron heridas y el presunto tirador, una estudiante de 15 años, murió, comentó el jefe de policía de Madison, Shon Barnes, a los periodistas.

La sospechosa, Natalie Rupnow, murió de una herida de bala autoinfligida antes de que los oficiales llegaran a la Escuela Cristiana Abundant Life el lunes por la mañana, dijo la policía.

Los oficiales no dispararon sus armas. Dos estudiantes fueron hospitalizados en estado crítico con lesiones potencialmente mortales, aseguró la policía, mientras que otros tres estudiantes y un maestro sufrieron lesiones que no amenazaban su vida.

La policía aún no ha sugerido ningún motivo para el ataque ni ha dicho si cree que las víctimas fueron atacadas específicamente. Los padres de la sospechosa están cooperando con la investigación, dijo el jefe de policía de Madison, Shon Barnes, a ABC News el martes.

«Ellos cooperaron. A pesar de esta tragedia, perdieron a una niña. Perdieron a un miembro de su familia», dijo Barnes.

«Es cierto que probablemente tengan más preguntas que nadie porque la conocían. Vivían con ella, así que queremos obtener qué tipo de niña era». Su padre está siendo interrogado por los investigadores,  informó Barnes, asegurando que no sabía si la madre había sido interrogada, señalando que había estado fuera de la ciudad.

La policía informó que el tiroteo se limitó a «un aula en una sala de estudio llena de estudiantes de múltiples niveles de grado». «Estaba en el pasillo, y estaba cambiando de mis zapatos a mis botas para ir a almorzar, porque tenía recreo después, pero luego escuché los disparos y los gritos», dijo una estudiante de segundo grado a la estación WLS de ABC Chicago.

Un estudiante de segundo grado fue quien hizo la llamada al 911, dijo Barnes.

«Un estudiante de segundo grado llamó al 911 a las 10:57 a.m. para informar de un tiroteo en la escuela».

El presidente Joe Biden calificó el tiroteo de «impactante e inconcebible» y pidió al Congreso que actuara de inmediato.

Biden instó al Congreso a aprobar leyes de seguridad de armas de «sentido común», incluidas las verificaciones universales de antecedentes, una ley nacional de bandera roja y una prohibición tanto de armas de asalto como de cargadores de alta capacidad.

El gobernador de Wisconsin, Tony Evers, a través de un comunicado advirtió que «No hay palabras para describir la devastación y el desamor que sentimos», llamando al tiroteo una «tragedia desgarradora».

Evers dijo que él y su esposa están «rezando por las familias y seres queridos de aquellos cuyas vidas fueron tomadas tan sin sentido y por los educadores, el personal y toda la comunidad escolar de Abundant Life».

«Es impensable que un niño o un educador pueda despertarse e ir a la escuela una mañana y nunca volver a casa», resaltó. «Esto nunca debería suceder, y nunca aceptaré esto como una realidad ni dejaré de trabajar para cambiarla». (ANSA)