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EVITA, UN RETRATO FASCINANTE DE UNA ÉPOCA
Por Edi Libedinsky ()
Buenos Aires.- «𝐄𝐯𝐢𝐭𝐚» (1996) es drama musical dirigida por Alan Parker, basada en el musical teatral de Andrew Lloyd Webber y Tim Rice.
La película está protagonizada por Madonna como Eva Perón, Antonio Banderas como Che (el narrador) y Jonathan Pryce como Juan Perón y cuenta la historia de Eva Duarte, una actriz ambiciosa que asciende para convertirse en la Primera Dama de Argentina y una poderosa figura política antes de su trágica muerte a los 33 años.
El filme sigue el viaje de Eva desde una niña rural pobre hasta una estrella de la radio en Buenos Aires. Conoce al coronel Juan Perón, un líder militar en ascenso, y se casan mientras él gana poder político.
Como Primera Dama de Argentina, Eva se vuelve amada por la clase trabajadora, defendiendo los derechos laborales y los programas de bienestar social. Sin embargo, enfrenta críticas de la aristocracia y los militares, quienes la ven como una oportunista manipuladora.
A lo largo de la película, Che sirve como un observador crítico, narrando su ascenso y caída.
No llores por mi, Argentina
La inmensa popularidad de Eva lleva a llamados para que se postule para la Vicepresidencia, pero su salud en declive la obliga a retirarse. Pronuncia un conmovedor discurso final, conocido como la escena de «No llores por mí, Argentina», antes de sucumbir al cáncer.
La nación llora su fallecimiento y su legado permanece profundamente arraigado en la historia argentina.
La actuación de Madonna fue ampliamente elogiada y la película ganó el Premio de la Academia a la Mejor Canción Original («You Must Love Me»).
La cinematografía, los trajes precisos de época y los grandes números musicales contribuyen a su escala épica. Si bien algunos críticos debatieron su precisión histórica, «𝐄𝐯𝐢𝐭𝐚» sigue siendo un retrato convincente de una de las figuras más controvertidas y fascinantes del siglo XX.
