El pastor tanzano que se convirtió en millonario y ayudó a su comunidad

Por Edi Libedinsky ()

En junio de 2020, Saniniu Laizer, un humilde pastor y minero a pequeña escala del norte de Tanzania, se topó con un descubrimiento que cambiaría su vida para siempre. Mientras trabajaba en las colinas ricas en minerales cerca del Monte Kilimanjaro, Laizer desenterró dos enormes piezas de tanzanita. Esta es una piedra preciosa rara que solo se encuentra en esa región.

Con un peso combinado de 15 kilogramos, eran las piedras de tanzanita más grandes descubiertas hasta ese momento. Cuando las llevó al Ministerio de Minerales de Tanzania, el gobierno compró las gemas por la asombrosa suma de $3.35 millones. Este hecho convirtió instantáneamente a Laizer en millonario.

Pero la fortuna no había terminado con él. Apenas unas semanas después, Laizer volvió a tener suerte y desenterró una tercera piedra de tanzanita que pesaba 6.3 kilogramos. Esta la vendió por $2.1 millones adicionales.

Sin embargo, no fueron solo las gemas las que captaron la atención del mundo, sino el hombre mismo. En lugar de entregarse al lujo o esconder su riqueza, Laizer hizo un compromiso público: usaría su fortuna para mejorar a su comunidad.

Escuelas, comidas

«Construiré una escuela para los niños de mi pueblo», dijo a los medios tanzanos, «y un pequeño centro comercial para que la gente pueda ganarse la vida con dignidad».

Fiel a su palabra, Laizer comenzó a construir una escuela gratuita en el distrito de Simanjiro con capacidad para 600 estudiantes. Su prioridad fue a los niños de familias pobres. «Un niño pobre no necesita padres ricos para ser educado», afirmó.

También celebró el momento histórico organizando un banquete masivo, sacrificando más de 200 vacas e invitando a todo el pueblo. En reconocimiento a su generosidad y patriotismo, Laizer fue honrado por la entonces vicepresidenta Samia Suluhu Hassan.

Su historia no es solo una de riqueza repentina, sino de profunda humildad, generosidad y amor por sus raíces. Es una prueba de que un hombre puede conseguir una fortuna y aun así permanecer anclado en los valores que más importan.