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Por Yoyo Malagón
Madrid.- El Barcelona vivió un cachumbambé en el partido ante el Villarreal en casa. Comenzó debajo 0-2, con la moral por el suelo, luego tuvo una remontada tremenda y se puso 3-2, y finalmente cayó al abismo con un 3-5 demoledor, que deja el entrenador en el aire.
Para lo amantes del fútbol fue un partido espectacular, de muchos goles, de jugadas vistosas y de errores ante ambos arcos, y los errores también hacen que el juego sea diferente, porque en las cercanías de las porterías, casi siempre terminan en gol y no fue la excepción esta vez.
El Barcelona salió mal y el Villarreal lo golpeó. Primero le anularon un gol a Gerard Moreno, pero luego el equipo de Marcelino García Toral anotó en dos ocasiones ante un equipo catalán golpeado, que no encontraba solución para llegar al arco rival, y encima con errores tremendos de la zaga.
Sin embargo, cuando Xavi Hernández sacó del campo al portugués Joao Félix y le dio entrada a Ferrán Torres, el equipo cambió, se fue arriba y en unos minutos no solo emparejó, sino que se adelantó con un 3-2 que parecía definitivo.
El técnico catalán, desde la banda, pedía cautela, les decía a los laterales que no fueran tan arriba, pero los jugadores estaban entusiasmados con la posibilidad de golear al Villarreal y lo pagaron caro.
A cinco minutos del final, el portugués Gonzalo Guedes se escapó por la derecha, en un descuido de una zaga demasiado adelantada para un equipo que iba ganando y puso el empate 3-3 y golpeó de muerte al Barcelona, porque lo que ocurrió después dejó muy mal parado al once catalán, que, al parecer, se despide de la Liga, unos días después de ser eliminado en la Copa del Rey.
El gol de Guedes mató al Barcelona. Y los minutos de alargue que dio el árbitro fueron tremendos para el Villarreal, que anotó dos veces, por intermedio de Sorlot y el comandante Morales, en un final loco, que deja a los de Xavi a 10 puntos del líder Real Madrid, que remontó un gol en contra en Gran Canaria para terminar ganando a Las Palmas por 1-2.
Para el Villarreal fue un golpe anímico, porque llegó a 23 puntos en 22 fechas y se alejó de las siempre peligrosas zonas de descenso.
En la próxima fecha, el 3 de febrero, el Barcelona irá hasta Mendizorrosa para medirse al Alavés, en tanto el Villarreal recibirá en La Cerámica, su campo, al Cádiz.
La derrota ante el Villarreal puede significar el adiós de Xavi Hernández como técnico, por más que la directiva haya dicho que el entrenador tiene toda su confianza. Habrá que esperar a las próximas horas para ver qué sucede con el futuro del banquillo, todo eso a unos días de los octavos de final de la Uefa Champions League ante el Nápoles italiano.