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DIOSDADO CABELLO, EL APEGO AL PODER

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Por Joel Fonte
La Habana.- Diosdado Cabello: «(…) ni por las buenas ni por las malas vamos a dejar el Poder en Venezuela(…)».
Para cualquier cubano patriota el hecho de que este delincuente, perseguido internacionalmente pise nuestra tierra y sea recibido como un héroe, es una bofetada a nuestra dignidad.
Pero Cuba dejó de ser República democrática hace décadas. No es el pueblo quien decide a quien recibe.
Los que controlan el país desde entonces son criminales, delincuentes que han cobijado, entrenado y exportado a los cinco continentes a hombres que han cometido actos terroristas y cobrado muchas vidas de personas inocentes.
Ese relato no es el que narran los seudo intelectuales de izquierda, los hombres de negocios, empresarios, artistas, parlamentarios, hombres de Estado y toda clase de individuos, que en todos estos años el castrismo ha reclutado en Centro y Suramérica, en Europa, y hasta en los mismos Estados Unidos…
Ellos solo quieren saber de la «Cuba heroica y revolucionaria que es ejemplo ante el mundo», de la «revolución que envía médicos y salva vidas desinteresadamente…», de la «Cuba del Che Guevara y su revolución permanente…»
Para ellos no existe un régimen que le amputo a la nación sus instituciones democráticas; que instaló aquí la dictadura más prolongada y cínica del hemisferio occidental; que dio refugio a terroristas del grupo separatista vasco ETA por largos años; la misma dictadura que ha acogido también por largos periodos a guerrilleros de las FARC y del ELN colombianos vinculados al narcotráfico y a actos terroristas en ese país y en Venezuela; la que subvertía gobiernos para que la URSS sembrara de comunistas sus pueblos.
Este propio convicto internacional, Diosdado Cabello, que se legitima en su país bajo los cargos de vicepresidente del PSUV y presidente de la ilegal Asamblea Nacional, está imputado en Venezuela por los delitos de corrupción, narcotráfico y lavado de dinero. Es señalado por múltiples organizaciones internacionales por ser líder del Cartel de los Soles, una organización terrorista integrada por militares fundamentalmente, y dirige personalmente los llamados «colectivos», que son un instrumento del régimen chavista para atemorizar, golpear, vandalizar y organizar actos de repudio a opositores al régimen, ahora dirigido por Maduro.
Esos «colectivos» son una copia casi fiel para Venezuela de los llamados en Cuba «grupos de respuesta rápida», autores de los actos más viles y miserables contra los opositores a la dictadura castrista, y que se vistieron de «paisanos» los días 11 y 12 de julio del 2021 para cometer actos horrendos…
La presencia de este bandido en la Habana no es casual. Si el castrismo se tambalea en Cuba, en Venezuela no ocurre menos. Allí hay una oposición política que aún conserva algunos mecanismos democráticos y se ha lanzado a una campaña electoral para sacar del poder a Maduro.
Viene a la Habana porque, como pasaba décadas atrás, sigue siendo este régimen putrefacto el organizador, orientador y coordinador de todos esos regímenes antidemocráticos que usurpan el poder en nuestra América…
Lo que pasa hoy en Venezuela, en Nicaragua… es la consecuencia de lo que antes pasó en nuestra Cuba.
Pero la noche no será eterna, y terminará más prontamente cuando los cubanos de bien se resuelvan a abandonar el silencio y exigir Libertad.
No más temor.
No más dictadura en Cuba.

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