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Por Anette Espinosa ()
La Habana.- Muy pocos cubanos acuden a la Plaza de manera voluntaria para el desfile del día del trabajador. Siempre hay alguien que va, porque cree que le debe mucho al castrismo, pero la inmensa mayoría son víctimas de chantaje.
Entre estos están los trabajadores del Instituto Cubano de Oftalmología (ICO) Ramón Pando Ferrer. A ver, me refiero a los empleados del Hospital La Ceguera, como lo conocemos la inmensa mayoría de los habaneros.
Acá les dejaré un mensaje que pasó la dirección, con el respaldo de las organizaciones políticas, a todos los trabajadores, y luego cada uno sacará sus propias conclusiones, y analizará si hay chantaje o no, y si los que laboran allí van a marchar por convicción.
«En días pasados hemos estado convocando a participar en el desfile del 1ro de Mayo, que por supuesto amerita la participación de todos, exceptuando a aquellos que realmente tengan una justificación para no asistir. De manera habitual la participación es muy pobre, y casi siempre son las mismas personas las que asisten.
«Es mi opinión, y así la emití el año pasado, que somos permisivos y no enfrentamos este tema con la energía que debe ser, sin cuestionar a los que, sin el más mínimo asomo de compañerismo o de respeto por todos, dejan de asistir, pero después discuten, se sienten con derechos, exigen y cuestionan, pero sin asomo de ningún sentimiento buscan a las organizaciones sindicales o políticas para emitir avales o creen que el consejo de dirección debe estar dispuesto a ayudarlos por ser trabajadores del ICO, aunque no se sientan trabajadores para ir al desfile.
«Ruego a todos dejar de ser débiles en los cuestionamientos, y claro que el compañero que no quiera ir no irá, pero debe ser identificado en el colectivo, y tratado como tal.
«El viernes será feriado por lo que han referido, y tendrán tiempo de descansar, una razón adicional para no dejar de asistir.
«Los cuadros y los militantes tienen que meterse de lleno en la tarea, y eso es prioridad para el día de hoy, los que quieran al ICO, aún sin ser jefes o militantes también deben apoyar.
«Más allá de la vergüenza de participar con un grupo muy reducido, me atrevo a decir que menos de 80 compañeros, da mucha pena en una institución que nunca desampara a nadie, ningún trabajador ha necesitado de nosotros y no hemos hecho de todo por ayudar, esto es de los trabajadores, y sin dudas un logro, esto es del ICO y no tiene que ver con nada más. Espero una participación masiva este año, cuento con todos».
Si esto no es chantaje, si no son presiones y no son camisas de fuerza a los trabajadores del Pando Ferrer, que venga alguien y me lo explique.
De esa forma, con esas presiones, conseguirán siempre que la gente acuda a marchar. Cierto es que trabajar no reporta mucho en Cuba, pero peor es no tener trabajo alguno y no recibir ni el mísero salario que paga Salud Pública a sus trabajadores y profesionales.
Y como hacen con los que trabajan en el ICO, lo hacen con las escuelas, con otros hospitales, con los de comunales o los estudiantes de las universidades.
El castrismo, por décadas, ha funcionado así y no será ahora, cuando está llegando al final, cuando renuncie a sus viejas prácticas, a sus sucias maneras.
Por mí pueden ir dos millones a la Plaza, marchar seis en todo el país, que me dará igual, y seguiré diciendo que el final del régimen está cada vez más cerca. Si quieren otra prueba, ahí va: andan locos rentando hoteles a todo el que quiera, y le da lo mismo que sean rusos, chinos o africanos.
Es algo así como la patada del ahogado. ¡Ustedes saben!