Por Renay Chinea()
Barcelona.- Ha sido un percance singular. Después de varios días fuera de la escuela, finalmente Pipo se presentó a su aula. Pero a media mañana, en la clase de Literatura, la profesora había indicado que los estudiantes tendrían que aparecerse este día, con un poema de algún escritor del siglo XX…
¿Y qué hizo Pipo? Se metió en Google, y tecleó: Renay Chinea poemas… y ahí está: lo primero que sale es un link de un poema mío que Margarita García Alonso publicó hace ya un buen tiempo…!
Cuando me lo contó sentí cierto vértigo y pudor mezclados.
—Apah, Papá… no sabes cómo zafé de esta…! — me decía emocionado..- mientras yo, ajetreado intentaba buscar de qué maldito poema se trataba…! En lo particular no me gusta públicar poemas por aquí… He escrito muchos… muchísimos, pero los guardo en una esquina, como se esconde un sueño o un remordimiento.
No son más que un exabrupto íntimo, un brote de emoción palpable que no sirve ni cambia nada…! Eso: un susurro para dormirte en la cuna de ti mismo, y que dudo mucho que le sirva a nadie más…!
—Y que te dijo la Profe?— quise saber intrigado…!
—Nada, quiso desaprobarme porque ese poeta porta mi mismo nombre… Y tuve que aclararle que eras tú, Papá…!
—Ves, no todo está perdido, hijo…! Aún mantengo en el pueblo cierto anonimato! (Por cierto, extraño mucho a Maggui por aquí…)
https://editionshoynohevistoelparaiso.wordpress.com/2022/04/12/he-dado-instrucciones-precisas-a-los-vivos-un-poema-de-renay-chinea/?fbclid=IwAR0AgC5aqPlSd0jPtOJMxHW5WFNvS1bd77iYgZPSCQvgsJ65DBc6Gd2e8P0