Yankees vs. Medias Rojas: El clásico que resurge en el infierno de octubre

Por Robert Prat ()

Nueva York.- El clásico de la Costa Este, una rivalidad que forjó leyendas con sangre, sudor y lágrimas, regresa al escenario que merece: la postemporada. A partir de este martes, el Yankee Stadium será el ring donde los Medias Rojas de Boston y los Yankees de Nueva York se disputarán no solo un boleto a la Serie Divisional, sino la supremacía en una de las rivalidades más intensas y antiguas del deporte.

No es solo otra serie de comodines; es un capítulo más de una guerra civil beisbolera que se remonta a más de un siglo. En el ambiente se respira la historia: desde el hurto de Dave Roberts en 2004 que cambió la maldición, hasta el jonrón de Aaron Boone que aún retumba en la memoria de Boston. La historia pesa, y ambos equipos lo saben.

Los Yankees llegan a este duelo con el amargo sabor de haber perdido el título de la División Este en el desempate frente a Toronto, pero con la ventaja de jugar toda la serie como local en el Bronx.

Su roster es una mezcla de poder y experiencia, liderado por el coloso Aaron Judge, quien cerró la campaña con una temporada monumental, liderando las mayores en promedio de bateo (.331), y aportando 53 cuadrangulares y 114 carreras impulsadas.

Las cartas de uno y otro

En la lomita, su arma principal es Max Fried, quien firmó un contrato millonario en la agencia libre y tendrá el honor de abrir el primer juego. Sin embargo, una sombra de duda ronda sobre el bullpen de los Yankees, que fue uno de los peores de las ligas mayores después del plazo de cambios, lo que podría ser su talón de Aquiles en una serie corta donde cada out es preciado.

Frente a ellos, los Medias Rojas de Boston se presentan como un equipo con algo que demostrar y con el historial regular a su favor. Dominaron la serie particular este año con un contundente 9-4, incluyendo una racha de ocho victorias consecutivas y un marcador de 5-2 en el mismo Yankee Stadium.

Su líder es el zurdo Garrett Crochet, quien no solo convenció a sus compañeros de viajar con atuendo de negocios a Nueva York, sino que ha sido dominante frente a los Yankees en 2025, con marca de 3-0 y una efectividad de 3.29.

La ofensiva de Boston ha encontrado su ritmo después de un inicio de temporada complicado (30-35), logrando un impresionante récord de 59-38 en lo que restaba del calendario para asegurar su primera aparición en playoffs desde 2021.

Analizando el duelo de abridores y las claves de la serie

La clave del encuentro radica en los duelos de lanzadores. El martes se vivirá un choque de aceites zurdos de primer nivel: Max Fried (19-5) por los Yankees frente a Garrett Crochet (18-5) por Boston.

Fried, quien se repuso brillantemente de unos problemas con una ampolla a mitad de temporada, tuvo una efectividad de 1.96 en tres salidas contra los Medias Rojas este año. Para el segundo juego, los Yankees confían en Carlos Rodón (18-9), mientras que Boston responderá con el abridor dominicano Brayan Bello (11-9).

A pesar del dominio de Boston durante la temporada regular, los pronósticos y las casas de apuestas dan una ligera ventaja a los Yankees como favoritos para ganar la serie. Esta confianza podría radicar en que, como expresó un analista, «es una tarea difícil ganar dos de tres en el Bronx para el club de Boston de este año».

Sin embargo, la experiencia en postemporada del mánager de Boston, Alex Cora, quien tiene un récord de 17-8 en octubre, es un activo intangible que no aparece en las estadísticas, pero que pesa enormemente en estos escenarios .

En definitiva, esta serie promete ser un choque de estilos y voluntades. Los Yankees, con su poderío ofensivo y la ventaja de jugar en casa, buscarán revertir la historia reciente. Los Medias Rojas, con un lanzamiento sólido, una confianza inquebrantable contra su rival y la chispa de un líder como Cora, confían en repetir el guion de la temporada regular.

Mientras el mundo del béisbol observa, solo hay una certeza: el clásico Yankees-Media Rojas está de vuelta en octubre, y otra página de la leyenda está a punto de escribirse.