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Por Guillermo Rodríguez Sánchez
Ciudad de México.- Hace un par de días fui a comprar algunas frutas a un supermercado mexicano y delante de mí iba a esta pareja de ancianos adquiriendo sus productos, llenando poco a poco su carrito con mucha naturalidad.
A la señora le falta un brazo, es discapacitada y supe que debido a eso no paga ningún medio de transporte público de la ciudad, es mostrar su carnet de impedida física en el metro, guaguas, cablebús, metrobús o cualquier otro y pasa sin abonar un centavo.
Algo similar ocurre si tienes más de 60 años, muestras tu cédula de identidad y no pagas nada.
Los dos son jubilados y estaban haciendo sus compras de la semana, sin mirar demasiado los precios andaban, más bien buscando lo que les fuera necesario para alimentarse.
Poco a poco los fui perdiendo de vista con el carrito casi repleto de comida…
Dos ancianos, dos jubilados, adquiriendo alimentos de forma normal, como debe ser.