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SEGUIMOS SIN SABER DE LA CRISIS, PORQUE GRANMA HACE MUTIS
Por Ramón García Guerra ()
La Habana.- Durante la década perdida (2008-2017) el crecimiento económico se ralentizó hasta llegar a una parálisis. La caída abrupta de 13% del PIB en Cuba entre 2020 y septiembre de 2021 agravó la situación.
Cuarenta meses después la crisis que enfrenta el país se convirtió en quiebra de la economía y naufragio del régimen, ahora de un modo irreversible.
Sucede que no nos hemos enterado porque Granma no ha publicado la noticia.
Estamos en medio de una situación que es un resultado del plan de los marxista-leninistas en Cuba que se empeñan en un retorno a la era sovietica (1971-1989); mientras que se hace un ajuste en la sostenibilidad del sistema, algo que la vida les demostró que era el punto flaco del mismo.
Luego dos de los cinco arquitectos del SDPE se hallan hoy vivos y es por uno de ellos que me entero de que el fracaso del sistema se debió a interferencias de Fidel Castro, quien era el principal opositor y quien fue el que impidió que aquel desplegará todas sus potencialidades.
Significa que las reformas de Raúl Castro no son pro-chinas, son neo-estalinistas.
Explica eso la resistencia que ofrece el régimen ante un proceso de democratización de la sociedad, que se sabe es una condición de posibilidad del desarrollo de la economía.
Creemos que tampoco se va a superar la fractura y el estado de precariedad de la sociedad con una democracia de élites, como la liberal-burguesa o la clase-obrerista.
