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Por Lara Crofs ()

La Habana.- A mí me molestan los apagones, claro que sí. Pero más me molestan los panfletos que intentan convertir la molestia en culpa, los sermones que pretenden domesticar la rabia del pueblo con frases manidas sobre “la soberanía” y “la Revolución sublime”.

Me molesta el moralismo del que se siente dueño de la verdad, del que cree que su fidelidad al fracaso lo hace más puro que los demás.

A mí me molestan los apagones y me molestan la gente como tú, que quiere darnos clases de dignidad desde un pedestal oscuro, mientras la gente cocina con leña, los niños estudian con velas y los hospitales se apagan con los pacientes adentro o peor médicos que no pueden hacer nada para que muchisimas vidas no pierdan su luz.

Me molesta quien confunde heroísmo con resignación, quien predica paciencia en guayabera, mientras come mejor que el pueblo, mientras tiene planta, carro y casa con luz.

A mí me molestan los apagones y me molesta que los mismos que llevan décadas justificándolos ahora se molesten con quienes se fueron, porque no soportaron vivir sin agua, sin comida, sin electricidad, sin futuro. ¿O acaso la dignidad solo vale si se sufre en silencio? Me molesta esa arrogancia que convierte al emigrado en traidor, como si marcharse fuera un lujo y no una herida propiciada por la tiranía.

A mí me molesta el apagón y me molesta tu manipulación de los conceptos. Porque soberanía no es tener hambre, ni independencia es vivir sin derechos. Justicia social no es un discurso, es comida, es agua, es techo, es electricidad. Son servicios públicos funcionando y al servicio del pueblo.

Me molestan tipos como tú

Me molesta los que como tú Michel E. Torres Corona repiten el catecismo del “bloqueo imperialista” sin atreverse a mirar el bloqueo interno, el que asfixia la creatividad, la economía, encierra la palabra y golpea la idea.

A mí me molesta el apagón y me molesta la cobardía de quienes no se atreven a decir que el modelo está roto, que la llamada “liberalización económica” solo benefició a los hijos de los mismos, a la casta con licencia para enriquecerse. Me molesta el doble rasero del que llama “nuevo rico” al emprendedor honesto, pero calla ante los negocios sucios de los hijos y familiares de los oligarcas.

A mí me molesta el apagón y me molesta el culto a los culpables de siempre: los Trump, los Biden, los Marco Rubio… Sí, todos esos existen a 90 millas, no gobiernan en Cuba. Aquí quien decide cuánto se gana, quién puede viajar, qué se puede decir, quién se puede manifestar y a qué hora nos dan la bienvenida al lado oscuro, es el poder que tú defiendes con tus letanías.

A mí me molesta el apagón y me molesta el dogma. Me molestan los predicadores del sacrificio ajeno, los revolucionarios que jamás trabajaron una tierra ni hicieron una cola, los poetas del hambre ajena, los guardianes del desencanto.

Me molesta la estética de la pobreza, el romanticismo del apagón, el fetiche del sufrimiento como prueba de pureza.

Los pueblos se cansan

A mí me molesta el apagón y me molesta el chantaje emocional de quienes nos acusan de “no tener sentido histórico” porque ya no queremos sobrevivir si no VIVIR. Si algo enseña la historia, es que los pueblos despiertan, se cansan, cambian.

Me molesta el cinismo de quienes piden optimismo mientras siembran desesperanza, de quienes confunden lealtad con servidumbre.

A mí me molesta el apagón y me molesta que el dolor se use como bandera.

Me molesta que se hable de “no monetizar el sufrimiento” mientras se justifica el sistema que lo fabrica.

Me molesta que se diga “Patria o muerte” cuando la patria es la que está muriendo, y no de bala, sino ante la desidia, el abandono, de silencio, la están matando de miedo.

Yo también estoy cansada, pero no de luchar, estoy cansada de que nos pidan seguir creyendo en lo que ya no cree ni quien lo dice.

Estoy cansada de los discursos que convierten la crítica en traición. Cansada de la culpa como herramienta de control contra mi pueblo.

Yo no busco enemigos ni aliados, busco luz. Luz verdadera. Y si eso te molesta, es porque brilla demasiado para tu oscuridad, porque los tipos como tú son los mayores traidores de esta Patria que no quiere saber de más muerte y si de vida.

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