MARRERO EL SIMPÁTICO

Por Oscar Durán

La Habana.- En Cuba no hay guerra, pero existe una economía de guerra. Este último término se lo ordenaron a decir hace un tiempo atrás a nuestro Primer Ministro, don Manuel Marrero. Y hoy volvió a la carga, delante de Esteban Lazo y todos sus muchachones. Estuve  a punto de cogerle lástima al ex ministro de Turismo, sin embargo, terminé apagando el televisor porque no se puede ser más cara de tabla en la vida.

La película “Duérmete mi niño” anda por la parte 9654. Ahora la palabra de moda es “corregir”  las insuficiencias propias creadas por fuerzas externas, como por ejemplo, el bloqueo, ese símbolo patrio y patrimonio inmaterial del Partido Comunista de Cuba.

La culpa nunca es de ellos. Ayer no se aceptaban dólares en efectivo, mañana empezarán a coger verdecitos porque están perdiendo dinero. Ayer las Mipymes eran las tipas, mañana serán las principales culpables del desastre económico de la isla. Y te lo van a decir en cadena nacional, con toda la seriedad del mundo, mientras tú los miras con el dedo pulgar derecho metido en la boca.

El teatro en casa no para. Todo parece un chiste, aunque no lo es. Es algo así como un trabalenguas: el lunes implementamos una medida, el martes nos dimos cuenta de que salió mal; el miércoles vamos a echar para atrás todo y anunciaremos una medida mejor; el jueves, con toda la “dignidad” del  mundo, estaremos informando al pueblo de que tampoco funcionó y estén pendientes a próximas intervenciones.

Es el cuento de nunca acabar. Si uno no los conociera, estuviera saltando de una pata y diciendo: “ahora sí, coño, ahora sí vamos a salir adelante”. Digo esto porque a Marrero se le oyó decir en la Asamblea Nacional términos como “reimpulsar la economía”, “bienestar del pueblo”, “garantizar la producción de alimentos”y “subsidios a personas y no a productos”. ¡Qué simpático Marrero!

Yo pensaba que iba a hablar del tema de la basura, las enfermedades, la canasta básica, los medicamentos, el déficit de médicos y profesores, la inseguridad en la calles, los apagones, la falta de agua y combustible… Nada de eso. Es la misma baba de siempre y con un cinismo cada vez mayor.

Por eso me quedo con el comentario en Cubadebate de un usuario llamado Queso proceso, quien en una nota sobre la intervención de Marrero en la Asamblea se soltó esta joyita:

“Caballero, ¿se sabe algo de la canasta básica?”