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Por Esteban Fernández Roig Jr. ()
Miami.- Muchísimos compatriotas hablan de los crímenes, del paredón, como “cosas del pasado”, como algo muy lejano que hasta les cuesta trabajo creer o recordar.
Pero, yo les digo a ustedes que nada ha cambiado. La única diferencia es que no existe la oposición armada, beligerante y agresiva contra el régimen.
Y entones, los esbirros, los cederistas, pueden darse el lujo de parecer benevolentes y hasta amigables con las “mariposas” que les traen vituallas del exterior y se limitan a abusar de los opositores pacíficos.
Si dejaran de ser pacíficos, y consiguieran 100 ametralladoras Thompson, inmediatamente los torturan, implantan de nuevo el paredón de fusilamientos y, en el mejor de los casos casos, vuelven a echarles 25 años de prisión y regresan el “Plan Camilo Cienfuegos” de trabajos forzados.
Los “Comités” tratando afablemente a los visitantes… eso es una orden recibida, además de que a ellos también les alivian sus carencias.
Si reciben una contraorden, a mordidas y escupitajos sacan de nuevo a los “gusanos” de la Isla. Quizás la única diferencia es que ya no les tirarán huevos… porque no hay.
La tranquilidad y parsimonia con que los domadores entran a las jaulas de los otroras fieros leones y hasta les meten la cabeza dentro de sus fauces, es la misma con que los apapipios castristas ven y tratan al pueblo cubano y a los visitantes.
Que suenen 20 bombas en La Habana y en San Santiago de Cuba, que se realicen atentados contra Raúl, contra su hijo el “tuerto”, que le tiren cócteles Molotov a las mansiones de Díaz-Canel, de Mariela y del “Cangrejo”, y antes 48 horas todos comprenderán QUE NADA HA CAMBIADO EN CUBA.
El aparato de represión es lo único que se mantienen intacto en Cuba. Y verán con sorpresa que hay mas HP en Cuba hoy que en 1959.