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Por Edi Libedinsky ()
La historia de Blaze Bernstein es un relato conmovedor y trágico de una joven vida con inmenso potencial que fue cortada abruptamente por la violencia, y que, lamentablemente, se entrelaza con el odio y los prejuicios.
Blaze Bernstein nació el 27 de agosto de 1998 en el Condado de Orange, California. Era el mayor de cuatro hermanos en una familia judía. Desde temprana edad, Blaze demostró ser un joven brillante, creativo y reflexivo. Se graduó de la Escuela Secundaria Orange County High School of the Arts en 2016, donde fue el orador principal de su clase. Sus intereses eran amplios y variados: le encantaba escribir, era apasionado por la gastronomía, y mostraba una gran curiosidad intelectual.
Después de la secundaria, ingresó a la Universidad de Pensilvania (UPenn), una prestigiosa institución de la Ivy League, donde cursaba su segundo año. En la universidad, se unió a la fraternidad Alpha Epsilon Pi y comenzó a explorar su identidad. Era una persona abierta sobre sus luchas con la ansiedad y su búsqueda de un camino en la vida, incluyendo la exploración de su sexualidad. Se había declarado gay ante algunos amigos cercanos, aunque no públicamente.
En enero de 2018, Blaze estaba en casa de sus padres en Lake Forest, California, durante las vacaciones de invierno de la universidad. La noche del 2 de enero de 2018, salió de su casa alrededor de las 23:00, supuestamente para encontrarse con un amigo en el Parque Borrego. Le dijo a su familia que volvería pronto, pero nunca lo hizo.
Cuando Blaze no regresó, su familia, comprensiblemente alarmada, informó su desaparición. Se inició una intensa búsqueda, con la participación de la policía, voluntarios y el FBI. Durante una semana, el destino de Blaze fue un misterio.
El 9 de enero de 2018, una semana después de su desaparición, su cuerpo fue encontrado enterrado en una tumba poco profunda en el Parque Borrego, el mismo lugar donde supuestamente se iba a encontrar con su amigo. La autopsia reveló que había muerto a causa de múltiples puñaladas.
La investigación rápidamente se centró en el «amigo» con el que Blaze supuestamente se había encontrado: Samuel Lincoln Woodward, un excompañero de clase de la secundaria. Las pruebas forenses, incluyendo ADN, vincularon a Woodward con el crimen. Woodward fue arrestado el 12 de enero de 2018.
Lo que hizo que este caso fuera aún más desgarrador fue el motivo detrás del asesinato. La investigación reveló que Samuel Woodward tenía profundas creencias homófobas y supremacistas blancas.
En mensajes y en su actividad en línea, se encontraron pruebas de su fanatismo. Se cree que Woodward asesinó a Blaze porque era gay, y posiblemente también por ser judío. Este aspecto transformó un caso de asesinato en un crimen de odio, conmocionando a la nación.
El juicio de Samuel Woodward comenzó años después debido a diversas demoras. Finalmente, en junio de 2024, fue declarado culpable de asesinato en primer grado con la circunstancia especial de crimen de odio. Se enfrenta a una posible sentencia de cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional.
La muerte de Blaze Bernstein dejó un vacío inmenso en su familia y en la comunidad. Sus padres, Jeanne y Gideon Bernstein, se han convertido en defensores incansables contra el odio y la intolerancia. Han fundado la «Blaze It Forward Foundation» para honrar su memoria y promover la bondad, la inclusión y la aceptación. La historia de Blaze es un recordatorio doloroso de la persistencia del odio en el mundo y de la importancia de luchar por la tolerancia y la comprensión.