Enter your email address below and subscribe to our newsletter

Jean Thurel, 75 años como soldado raso

Comparte esta noticia

Sirvió durante 75 años. No como general, ni como oficial… sino como soldado raso. Y lo hizo por voluntad propia.

Jean Thurel nació en 1698 y murió en 1807, con 108 años. Pero su longevidad fue apenas una parte de lo extraordinario: su vida fue una marcha ininterrumpida por la historia de Francia, con el uniforme puesto.

Se alistó en 1716 y luchó por primera vez en 1733, en el asedio de Kehl, durante la Guerra de Sucesión Polaca. Allí recibió un disparo en el pecho… y sobrevivió.

En 1747, se separó de su regimiento durante el sitio de Bergen. En vez de rendirse, escaló solo las murallas de la ciudadela para reencontrarse con sus compañeros. En 1759, en la batalla de Minden, recibió seis heridas en la cabeza provocadas por una espada… y volvió a sobrevivir.

Pero su camino no estuvo exento de dolor. Tres de sus hermanos murieron en la batalla de Fontenoy, y su hijo cayó en el combate naval de Saintes, en 1782.

A los 89 años, sus oficiales le ofrecieron marchar en carruaje. Él lo rechazó: “Jamás lo he hecho, y no empezaré ahora”. Siguió marchando a pie con su regimiento.

En 1787 conoció al rey Luis XVI, quien le otorgó una pensión por su servicio. Y en 1800 fue recibido por Napoleón Bonaparte, que lo admiraba profundamente.

Durante décadas, le ofrecieron ascensos. Siempre los rechazó. Quiso ser lo que fue desde el principio: un simple soldado francés.

Jean Thurel no fue recordado por su rango, sino por su constancia. Por su lealtad. Por encarnar el espíritu de quien sirve sin esperar más que el honor de hacerlo.

Deja un comentario