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EL PAN NUESTRO: TIENDAS EN DÓLARES Y VUELTOS EN CARAMELOS
Por Javier Pérez Capdevila ()
Guantánamo.- Primero que todo, la aparición gradual de tiendas que vendan en dólares es una evidencia de que el bloqueo es selectivo. Y digo esto, porque tal parece que para obtener productos diversos para estas tiendas el bloqueo no tiene ningún efecto, y sin embargo si lo tiene para bloquearnos alimentos y medicamentos que necesitamos obtener en la moneda en la cual nos pagan.
Es inexplicable que existan dichas tiendas y que no podamos adquirir allí los productos pagando con el MLC, moneda que asume el papel del dólar que el gobierno adquiere y lo convierte en esa moneda digital. Es decir, que el MLC es un cambio del dólar al uno por uno.
Ya los cubanos fuimos afectados con la desaparición del CUC y el cambio que se aplicó. Ahora, los que tienen MLC están afectados con el cambio frente al dólar y de contra limitados a adquirir los productos que aparecen en dólares y no en MLC, donde los tipos de ofertas han ido y siguen disminuyendo continuamente.
Con respecto al planteamiento que se hace en el vídeo (), debo aclarar conceptos antes de llegar a conclusiones.
Una moneda de cambio es un tipo de activo que se utiliza como medio para facilitar el intercambio de bienes y servicios. En un sentido más amplio, puede referirse a cualquier forma de dinero que se acepte en una transacción comercial. Sin embargo, el término también puede tener connotaciones específicas en diferentes contextos.
En algunas culturas o ámbitos, ciertos bienes pueden funcionar como moneda de cambio.
Ejemplos:
Sal: Históricamente, la sal se utilizaba como medio de intercambio en varias civilizaciones.
Ganado: En sociedades agrícolas, el ganado puede ser utilizado como forma de pago.
Una vez hechas estas aclaraciones llegó a las siguientes conclusiones:
El caramelo y otras confituras, estas últimas conocidas por lo que se dice en el vídeo, son una nueva moneda de cambio y como tal deberían ser recibidas como pagos para adquirir otros productos, porque no pueden obligarme a pagar un producto que yo no quiero comprar aunque cueste solamente 10 centavos.
La expresión del conductor o moderador de la mesa redonda es sencillamente ambigua e inaceptable, cuando dice: ¿la moneda, quienes la tienen, por supuesto no la van a dar?. Es decir, que la moneda metálica es para él un dinero que solo cumple la función de atesoramiento, lo cuál es un disparate. Aquí quizás no la den porque tampoco la van a recibir.
Esta medida de dar vueltos con caramelos y con frituras como moneda de cambio, financieramente debe permitir obligatoriamente su recibo para pagar otros productos.
Les propongo una SOLUCIÓN para el problema de los vueltos: Hagan un redondeo de los precios POR DEFECTO (no por exceso por el bien del pueblo) convirtiéndolos todos en números enteros.
Finalmente, yo podría reconocer que porque me estoy poniendo viejo no puedo comprender esta «modernidad», para la que seguramente tienen una explicación lo suficientemente incoherente, o civilizadamente salvaje.
PD: Lo único que podría ayudar a resolver estas disyuntivas financieras es que circule sola y únicamente el CUP, y que la prioridad no sea la captación de divisas sino la satisfacción de las necesidades cada vez más crecientes de la población, ya que por Constitución no renunciaremos al socialismo. Demuestren respeto a la constitución.
