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Carlos Cabrera Pérez
Madrid.- El dólar estadounidense, el euro y la Moneda Libremente Convertible (MLC) están bajando su cotización en Cuba porque el gobierno congeló las operaciones de cuentapropistas, reveló una funcionaria del Banco Central, que exigió el anonimato por temor a represalias.
“La medida fue implantada la semana pasada e, inicialmente, se nos dijo que sería por diez días, durante los cuales los cuentapropistas no podrán operar con sus tarjetas (de crédito y débito) ni extraer efectivo de sus cuentas”, precisó la funcionaria, que aseguró desconocer si la restricción bancaria obedece a temores del gobierno a un estallido popular en verano.
“Soy una técnica, me identifico con la política social de la revolución, pero sé que para mantenerla hay que ser eficientes y productivos y ustedes, los periodistas extranjeros y cubanos de afuera, rara vez asumen que somos un país bloqueado y perseguido por Estados Unidos y cada gobierno tiene derecho a implantar la política monetaria que considere más conveniente para sus intereses”, abundó.
En los últimos días, las divisas extranjeras y el MLC han registrado sendas bajas en sus cotizaciones frente al peso cubano; tras haber rozado la cifra de 400 pesos por un dólar, que economistas y analistas denominaron tasa psicológica de un número redondo, a la que achacaron el frenazo.
Hasta el momento de redactar esta nota, el gobierno cubano no ha informado sobre las causas de la bajada repentina de la cotización de las principales divisas extranjeras ni de las medidas que ha tomado para paliar el desequilibrio.
“Yo me enteré de la medida, estando ya de compras en el extranjero, y antes de viajar, pude sacar dinero sin problemas para comprar dólares para pagar las importaciones, que haré; aunque tendré que revisar precios, cuando vuelva porque nadie sabe decirme hasta cuando durará esto”, comentó una cuentapropista, que no ha podido comprobar la congelación temporal de cuentas ni tarjetas.
Los cuentapropistas son los principales animadores del mercado paralelo de divisas debido a que deben adquirir grandes cantidades para importar equipos y bienes que luego venden en Cuba a precios de mercado, sustentados en la tasa real de cambio y no en la oficial, que el gobierno sigue sin modificar a parámetros más realistas.
“El dólar y el euro han estado bajando estrepitosamente en estos días por una maniobra del gobierno (cubano) y no porque la situación haya mejorado, aquí seguimos peor, con más inflación y apagones que nunca”, aseguró un operador del mercado informal de divisas, que reconoció obtener buenas ganancias con las operaciones que realiza, ayudado por un hermano emigrado en Europa.
La medida ha llenado de incertidumbre a los pequeños y medianos empresarios cubanos; especialmente a aquellos que no han podido abrir cuentas en el extranjero para burlar el control gubernamental, que incluye una política impositiva restrictiva y represión policial, acompañada de corrupción de policías e inspectores.
“Cuando se aclare al panorama, entonces haremos análisis de costes e inventario de daños; aunque los más perjudicados con esta medida temporal son nuestros clientes, que se ven privados de los productos y servicios que le ofertamos”, aseguró el cuentapropista.
Para este lunes, el aparato de propaganda comunista anunció un espacio especial sobre El Toque, al que identifica con supuestos planes de la CIA estadounidense para desestabilizar la economía cubana; un argumento que repiten machaconamente la prensa estatal e influencers alineados con La Habana.
Varios economistas cubanos han advertido sobre la debilidad del peso, que achacan a la crisis económica, reflejada en la baja producción de alimentos, bienes y servicios, lastrada por la carencia de energía eléctrica, que daña a la industria desde el otoño de 2019 y que ya ha alcanzado al sector residencial con apagones de varias horas.
En un podcast reciente, un alto funcionario del gobierno alabó a los cubanos que adquieren electrodomésticos y aires acondicionado, a quienes recomendó “climatizar sus casas y ponerlos a 24 grados” Celsius de temperatura, en un intento por ponderar a la minoría que vive mejor que la mayoría, alegrándose de su prosperidad.
En el mismo espacio, el presidente Miguel Díaz-Canel Bermúdez leyó varias opiniones y sugerencias de cubanos para mejorar el servicio eléctrico y la vida de los ciudadanos. “No todo es negativo, indicó, también hay opiniones positivas y sugerencias”, añadió.
Recientemente, fracasó un intento ruso para abastecer tiendas en Cuba, debido a que el gobierno de la isla pretendía que los pagos de los clientes se giraran a un banco local, que luego pagaría a empresas vinculadas al Kremlin, que puso como condición cobrar directamente de los clientes cubanos.