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Por Pedro Monreal (El Estado como tal)

La Habana.- Con un título capcioso publicó Cubadebate una nota de prensa sobre reunión del consejo de ministros. En Cuba, la urgencia inmediata no es burocrática (“avanzar en la eficiencia del control”), sino económica (crecimiento). Además, lo relevante a mediano plazo es erradicar la exclusión política, económica y social.

La proposición de que ahora se potenciarían mecanismos para que “de manera más directa, la población participe en la toma de decisiones” parece engrosar el rosario de “garantías”. Tal es aquella de que con el “ordenamiento” los trabajadores estatales estarían mejor.

Se utiliza un lenguaje enrevesado de “crecimiento, pero incumplimiento del plan” y de “cumplimientos que no cubren satisfacción de demandas”. Está desprovisto de autocrítica de dirigentes y funcionarios sobre las causas. Esto es necesario para poder construir un relato favorable a ellos mismos.

No queda claro cuál pudiera ser la evidencia que apoyase la rimbombante declaración de que lo que discuten en las reuniones mensuales del consejo de ministros es “el programa de gobierno con enfoque científico”. ¿Qué tipo de ciencia exactamente sería esa?

La Agricultura sigue al margen

La parte sobre agricultura es probablemente la más engañosa de lo dicho en la reunión. Hablar de “avances en la contratación” expresa una visión burocrática. Esto deja claro que lo que realmente está “muy por debajo” no es tanto la producción sino la política agropecuaria.

La redacción sobre el presupuesto no es clara. Se anuncia superávit de 359 millones de pesos en el balance general de ingresos y gastos en el primer trimestre de 2025. Sin embargo, es difícil entender la relevancia de tal cifra con un déficit anual planificado de 88,5 mil millones.

Probablemente la parte más turbadora de la reunión fue la referida al decrecimiento poblacional, entrando en una trampa sin salidas claras. Este aumento de gastos de vejez (pensiones, salud) ocurre simultáneamente con reducción de la fuente de contribuciones (trabajadores activos).

De las tres opciones para resolver el impasse económico asociado a una reducción de población + envejecimiento hay dos que serían impopulares: reducir servicios públicos para mantener pensiones y recortar pensiones y beneficios para los ancianos.

Existe una tercera opción sobre la que todavía no parece existir una posición oficial: estimular la inmigración en una escala relativamente amplia (retorno de emigrados y/o arribo de extranjeros). Sin embargo, también pudiera ser una opción impopular. Ahí lo dejo…

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