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Por Esteban Fernández Roig Jr. ()
Miami.- 1959: Unos lucían asustados, otros sorprendidos, la mayoría y -sobre todo los oportunistas- celebraban la partida del general Batista al que muchos llamaban dictador.
El hombre al cual yo he respetado, escuchado, admirado, querido y obedecido me dijo extremamente serio sólo cuatro palabras: “¡Estebita, se jodió Cuba!”
En realidad sentía un gran alivio, porque los nuevos soldados parecían amigables, ya no había el peligro de que los revolucionarios pondrían bombas y petardos indiscriminadamente, se terminarían las huelgas en el centro de enseñanza y podría estudiar tranquilamente.
Al mismo tiempo experimenté una gran repugnancia con la extrema guataquería con Fidel, con el Che y hasta con el más humilde soldadito Rebelde.
Carlos Puebla cantaba “Llegó el comandante y mandó a parar” mientras el Indio Naborí, (Jesús Orta Ruiz) lanzaba el más lamebotas poema jamás escuchado: “Eso que Cuba ya no sea un cuartel tiene un nombre: se llama Fidel”…
Todo lo que escuchaba, todo lo que veía, todos los hechos en mi entorno, le iban dando la razón a la predicción de mi padre.
Tanto así, que el ocho de enero cuando el engendro de Birán entró a La Habana ostentosamente montado en un tanque en el medio de Camilo y Huber Matos, ya yo estaba absolutamente seguro de que era un tremendo hijo de p. que intentaba adueñarse de la Isla.
Subió a la tribuna sudoroso, y comenzó por primera vez a regañar al pueblo de Cuba, actuando como si él fuera el capataz de un enorme finca y los cubanos un hatajo de ganado.
A mi lado se escontraba mi padre, más que ver a la televisión me observaba, no me perdía ni pies ni pisada, escudriñando cada gesto, cada expresión de mi rostro y me repitió más de cinco veces: “¡Este tipo es un gánster!”
De pronto, unos apapipios le lanzaron unas cuantas palomas para arriba (intentando crear un momento místico) una de ellas se posó en su hombro y se defecó en él.
Por primera vez el viejo se sonrió amargamente y me dijo: “¡Eso mismo vengo haciendo yo desde el 26 de Julio del 53!”.