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La Paz.- El presidente boliviano Luis Arce ordenó el miércoles a la policía y las Fuerzas Armadas despejar las vías bloqueadas desde hace 10 días por los seguidores del exmandatario Evo Morales. Estos seguidores protestan contra la inhabilitación de su líder para los comicios presidenciales de agosto. Arce sostuvo en una conferencia de prensa que los bloqueos y ‘actos vandálicos y de violencia’ tienen ‘como único objetivo derrocar al gobierno nacional’.
El mandatario dijo que instruyó el desbloqueo de toda la ruta que conecta la región central de Cochabamba. Esta ruta incluye la carretera que une el occidente y el oriente del país.
La semana pasada la policía intentó despejar el lugar pero los manifestantes volvieron a cortar los caminos.
Poco después el Ministerio de Salud informó que al menos dos policías resultaron heridos. Fueron atacados por piedrazos arrojados por los manifestantes al comenzar el operativo de despeje en la localidad de Parotani, a las afueras de Cochabamba.
Los seguidores del expresidente Morales (2006-2019) rechazan un fallo judicial que lo inhabilitó a postularse a un tercer mandato. Insisten en que se permita inscribir su candidatura.
La víspera violentos enfrentamientos entre pobladores y manifestantes dejaron más de 30 heridos. Esto ocurrió en la pequeña ciudad de Llallagua, unos 290 kilómetros al sur de La Paz.
Al lugar fueron desplegados el miércoles militares y policías en un operativo para restablecer el orden, dijo el viceministro de Régimen Interior, Jhonny Aguilera.
Los cortes de ruta han dejado varados decenas de vehículos con alimentos y combustible en seis de las nueve regiones de Bolivia. Según el gobierno, han provocado pérdidas por más de 100 millones de dólares.
‘Comprar un pollo es como recibir un trofeo’, dijo a The Associated Press Marta Muñoz, de 73 años. Ella debió hacer fila durante casi cinco horas en un mercado callejero en un barrio popular de La Paz para conseguir el alimento.
‘Esto es resultado de la pelea del presidente Arce y Evo… No podemos seguir así’, se quejó la mujer. La vendedora Juana Quispe explicó que por los cortes sólo recibe un 40% del total de pollo que suele llegar a su puesto. Además, el precio ha aumentado un 20%.
‘Con estos operativos… sólo van a crear mayor sublevación del pueblo boliviano. El gobierno no resuelve la crisis’, dijo Morales a la radio Kausachun Coca en la región del Chapare, en el centro de Bolivia. Allí permanece desde octubre. La justicia ordenó su arresto por negarse a responder en una causa por el presunto abuso de una menor cuando era presidente.
El gobierno ha denunciado penalmente a Morales por incitar a la violencia. Además, la policía ha detenido a unos cinco dirigentes cercanos a él. Estos dirigentes amenazaron con más protestas si no se registra al exmandatario como candidato. (AP)