Beijing.- China contrarrestó los aranceles impuestos por Donald Trump a los productos chinos con otros propios a múltiples importaciones estadounidenses el martes, además de anunciar una investigación antimonopolio contra Google y otras medidas comerciales.
Beijing indicó que impondrá un arancel del 15% a productos de carbón y gas natural licuado, así como uno del 10% al petróleo crudo, la maquinaria agrícola y los automóviles de gran cilindrada importados de Estados Unidos.
Los nuevos impuestos entrarán en vigor el próximo lunes.
‘El aumento unilateral de aranceles por parte de Estados Unidos viola gravemente las normas de la Organización Mundial del Comercio’, señaló un comunicado de una oficina del Ministerio de Finanzas.
‘No solo no ayuda a resolver sus propios problemas, sino que también daña la cooperación económica y comercial normal entre China y Estados Unidos’.
China es el mayor importador mundial de gas natural licuado (GNL) y Australia, Qatar y Malasia son sus principales proveedores.
Estados Unidos, que es el mayor exportador de GNL a nivel global, no tiene exportaciones considerables de GNL a China.
En 2023, Estados Unidos exportó alrededor de 16.000 millones de metros cuadrados (173.247 millones de pies cúbicos) de GNL a China, que representan aproximadamente el 2,3% del volumen total de exportaciones de gas natural, según datos publicados por la Administración de Información Energética estadounidense.
Por su parte, la Administración Estatal de Regulación del Mercado china dijo también el martes que está investigando a Google por la presunta violación de las leyes antimonopolio.
Aunque el anuncio no mencionó específicamente los aranceles, se produjo apenas unos minutos después de la entrada en vigor de los aranceles del 10% ordenados por Trump sobre el gigante asiático.
No está claro cómo afectará la investigación a las operaciones de Google en el país, donde tiene una presencia limitada y su motor de búsqueda está bloqueado, como la mayoría de las plataformas occidentales.
Google abandonó el mercado chino en 2010 después de negarse a cumplir con las solicitudes de censura del gobierno y tras sufrir una serie de ciberataques. Google no realizó comentarios de inmediato.
Los analistas dijeron que las medidas de represalia de China tendrían efectos adversos no solo en la economía estadounidense sino también en el resto del mundo.
‘Tienen un régimen de control de exportaciones mucho más desarrollado. Dependemos de ellos para muchos minerales críticos como galio, germanio, grafito, entre otros. Así que… podrían causar un daño significativo a nuestra economía’, señaló Philip Luck, exfuncionario del Departamento de Estado y director en el Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales, el lunes en un foro.
La respuesta de China parece calculada y medida, indicó Stephen Dover, estratega jefe de mercado y jefe del Instituto Franklin Templeton. ‘Existe el riesgo de que esto sea el comienzo de una guerra comercial recíproca, lo que podría resultar en un menor crecimiento del PIB en todas partes, una mayor inflación en Estados Unidos, un dólar más fuerte y una presión al alza sobre las tasas de interés de estadounidenses’, afirmó Dover.
Los nuevos aranceles estadounidenses a productos procedentes de Canadá y México también debían entrar en vigor el martes, aunque Trump acordó una moratoria de 30 días en sus amenazas contra sus vecinos, mientras tratan de apaciguar sus preocupaciones sobre seguridad fronteriza y tráfico de drogas.
Trump planeaba hablar con su homólogo chino, Xi Jinping, en los próximos días.
Además de los aranceles, China anunció controles de exportación sobre varios elementos críticos para la fabricación de productos modernos de alta tecnología.
La medida afecta a tungsteno, telurio, bismuto, molibdeno e indio, muchos de los cuales están catalogados como minerales críticos por el Servicio Geológico estadounidense, lo que significa que son esenciales para la seguridad económica o nacional de Estados Unidos y tienen cadenas de suministro vulnerables a interrupciones.
Los controles de exportación se suman a los que Beijing impuso en diciembre sobre elementos clave como el galio utilizado en la industria manufacturera.
El Ministerio de Comercio también incluyó a dos empresas estadounidenses en una lista de entidades no fiables: PVH Group, propietaria de Calvin Klein y Tommy Hilfiger; e Illumina, una empresa de biotecnología con oficinas en China.
Su entrada en este listado les prohíbe participar en actividades de importación o exportación relacionadas con China así como realizar nuevas inversiones en el país.
Beijing comenzó a investigar a PVH Group en septiembre del año pasado por ‘comportamiento inapropiado relacionado con Xinjiang’, luego de que la firma supuestamente boicoteó el uso de algodón procedente de esa región china. (AP)