Por Arturo Mesa ()
Atlanta.- En Pensilvania hay una tradición que ya cuenta con 139 años. En el distrito de Punxsutawney, existe una marmota llamada Phil, que cada segundo de febrero pronóstica si el invierno se prolongará durante otras seis semanas o si tendremos una primavera temprana.
Alrededor de la leyenda del animal existe un círculo centenario o asociación de cuidadores de Phil, que mantienen la tradición de la predicción de la marmota, y año tras año el animalito sale de su madriguera y pronostica qué va a pasar. Por si pareciera esto un cuento de hadas, les comento que allá se dan cita cientos de personas, entre locales y turistas, con el solo objetivo de observar por cuánto tiempo más habrá que usar los abrigos y las palas para sacar la nieve de las entradas de las casas.
Temprano en la mañana de este domingo, allí se reunió el Círculo con sus trajes, sus bastones y sus sombreros de pico. Asistieron además, el gobernador del Estado como para darle oficialidad al evento y varias personalidades del mundo del espectáculo.
Una vez el presidente de los cuidadores determinó que era ya la hora justa, mostró su bastón que también es centenario y que está entrenado para hablar con Phil en su lenguaje conocido como el marmoteño. Luego dio sendos golpes en la puerta del árbol en donde vive el roedor, y procedió al inicio de la tradición.
La muchedumbre animó en medio de la helada mañana y gritó el nombre de Phil para que despertara. Eran las siete con veinticinco minutos de la mañana cuando las luces del día comenzaban a irrumpir por el Este y cuando el animalito escuchó los tenues golpes de bastón a su puertecilla.
Phil no quería salir, no lo culpo, ha sido un duro y largo invierno, pero al final lo hizo – o quizás fue el bastón el que le dijo que no había nada que temer—. La muchedumbre gritaba emocionada cuando lo cargaron y lo levantaron para que todos lo vieran. Se veía aletargado y sorprendido; era un animal cuidado y hermoso. Luego lo colocaron en el tronco del árbol para que hiciera su predicción y a pesar de que las temperaturas hoy llegaron hasta casi los 20 grados, el animalito se colocó de forma tal que podía ver su sombra, lo cual implica que por estas latitudes a los abrigos y a las palas, les quedan todavía otras seis semanas.
Phil regresará muy pronto a su morada, mientras los asistentes se darán cita en los bares y restaurantes del pueblo para celebrar de su tradición por todo lo alto antes de las próximas heladas.