Por Pucho Oroza
Varadero.- El deporte cubano recoge a grandes exponentes que se han hecho un espacio por derecho propio. Tal es el caso del boxeador historia, la pegada más temida en todo el mundo, el ganador de todos los títulos que concede la Asociación Internacional de Boxeo Amateur (AIBA): Félix Savón.
Guantanamero, del poblado de San Vicente, Savón se convertiría en toda una leyenda a base de poderosísimos rectos de derecha que dejaban sin opciones a sus oponentes. Bien temprano dejaría claro su potencial cuando en 1985, a los 18 años, ganó el Campeonato Mundial Juvenil de Boxeo.
Durante sus 20 años de carrera, se tituló tres veces campeón olímpico, (1992, 1996, 2000), igualando la hazaña de Teófilo Stevenson y el húngaro Laszlo Pap. Seis veces se coronó campeón mundial, cuatro veces de la Copa del Mundo, además, de ser el único boxeador en ganar tres oros en los Juegos de Buena Voluntad.
Félix fue Tricampeón en Juegos Panamericanos y cuatro veces titular de los Juegos Centroamericanos y del Caribe. Ganó 13 títulos en Torneos Playa Girón, siendo el mayor ganador a nivel nacional, hasta la corona 14 de Julio César la Cruz. Su récord de 258 victorias ante sólo 10 derrotas es un monumento a su brillantez y mentalidad ganadora.
Félix Savón es una de las grandes leyendas del boxeo amateurs en todo el mundo, su extraordinaria pegada, sus combinaciones en el ring, su superioridad ante sus rivales daba miedo. Verlo boxear era un lujo, alumno aventajado del gran Alcides Sagarra, uno de los máximos exponentes de la escuela cubana de Boxeo. El boxeador historia.
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