Por Pucho Oroza
Varadero.- El Béisbol es un deporte apasionante, lleno de jugadas, hechos, anécdotas, que van más allá de los propios jugadores. Un mundo interesante que nos deja historias increíbles como estas:
El pasado 13 mayo, en el partido entre Seattle Mariners vs. Kansas City Royals, ocurrió algo increíble, un aficionado capturó dos fouls consecutivos por el jardín izquierdo del jugador en turno. Según Statcast la probabilidad de que el aficionado pudiera atrapar dos foul de manera consecutiva era de 1 en 100,000, realmente algo muy difícil de que ocurra y que le dió ribetes de espectacularidad.

Hace dos días, en el juego de Rojos y Dodgers, Spencer Steer estando en el cajón de bateo, conectó un foul hacia atrás del plato y la pelota fue capturada por su hermano gemelo Trevor, que estaba disfrutando del partido con algunos familiares. Una probabilidad, también bastante baja de que pudiera ocurrir, además, porque era el primer juego que su hermano veía en todo el año.
El 9 de agosto de 2018, Carlos Correa, que se encontraba en rehabilitación asignado con los Hooks de Corpus Christi, sucursal Doble A de los Astros, en uno de sus turnos al bate conectó un foul que fue a parar a las manos de una fanática en las gradas, la joven que capturó la bola era nada más y nada menos que su prometida Daniella Rodríguez.
Nada, que el béisbol deja estas cosas caprichosas, casualidades que hacen del mismo, un deporte hermoso.
Post Views: 178