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Por Anette Espinosa ()
El poder, cuando se prolonga demasiado, deja de ser un servicio para convertirse en un rasgo distintivo de un régimen. En la historia moderna, varios líderes —presidentes, primeros ministros o figuras autoritarias— han gobernado sus países durante décadas, algunos incluso superando el medio siglo en el cargo.
Aquí presentamos, en orden descendente, a los 10 gobernantes no monárquicos que más tiempo han permanecido en el poder, con sus logros, polémicas y el peso de su legado 1412.
Afwerki, líder del Frente Popular para la Liberación de Eritrea, ha gobernado el país desde su independencia de Etiopía en 1993. Su régimen, considerado uno de los más represivos del mundo, ha mantenido un férreo control militar, sin elecciones libres y con un servicio nacional obligatorio que ha provocado un éxodo masivo de jóvenes.
Conocido como «el último dictador de Europa», Lukashenko ha gobernado Bielorrusia desde 1994, manteniendo un sistema soviético en pleno siglo XXI. Su presidencia se ha caracterizado por la represión a la oposición, fraudes electorales y una estrecha alianza con Rusia, consolidada tras la crisis migratoria de 2021 y la invasión a Ucrania.
Llegó al poder tras una guerra de guerrillas y prometió democracia, pero su régimen se ha vuelto cada vez más autoritario. Aunque Uganda ha tenido crecimiento económico bajo su mandato, la corrupción, la persecución a la oposición y la eliminación de límites presidenciales en 2017 han ensombrecido su legado.
Biya, apodado «la Esfinge» por su silencio calculado, gobernó Camerún con mano de hierro hasta su muerte en 2022. Su régimen, marcado por la corrupción y la represión de las minorías anglófonas, lo convirtió en uno de los líderes más longevos de África.
El «Hermano Líder» de Libia gobernó con un sistema político único («Jamahiriya») y una personalidad excéntrica. Aunque modernizó el país con petrodólares, su régimen fue brutalmente represivo. Su caída en 2011, durante la Primavera Árabe, terminó con su linchamiento.
Obiang derrocó a su propio tío en un golpe y desde entonces ha gobernado con puño de hierro. A pesar de la riqueza petrolera del país, la mayoría de la población vive en la pobreza, mientras él y su familia acumulan fortunas. Es el presidente más longevo en el cargo actualmente.
Fundador del régimen norcoreano, instauró una dinastía comunista que sigue vigente. Su culto a la personalidad, la economía juche y el aislamiento internacional definieron su mandato. Tras su muerte, fue declarado «Presidente Eterno» .
Líder del Kuomintang, gobernó China hasta 1949 y luego Taiwán en el exilio. Su régimen fue autoritario, con la Ley Marcial vigente durante décadas. Aunque modernizó Taiwán, su legado sigue siendo polémico por la represión política.
Sí, Biya aparece dos veces: primero como primer ministro (1975–1982) y luego como presidente (1982–2022). Su longevidad en el poder solo es superada por monarcas históricos. Murió en 2022, pero su influencia en la política camerunesa sigue presente.
El dictador cubano cubano transformó una isla casi paradisíaca en Estado socialista empobrecido. Su gobierno, aunque alabado por sus supuestos logros en salud y educación, fue criticado por la falta de libertades y el exilio masivo de disidentes. Renunció en 2008, dejando el poder a su hermano Raúl.
Estos líderes, ya sea por carisma, represión o manipulación institucional, demostraron que el poder puede perpetuarse más allá de lo democráticamente aceptable. Mientras algunos dejaron un legado de estabilidad (a costa de libertades), otros convirtieron sus países en cleptocracias. Su impacto histórico sigue siendo objeto de debate, pero su longevidad en el poder es, sin duda, un récord difícil de superar.