Enter your email address below and subscribe to our newsletter

LA DOCTRINA STIMSON Y EL GOBIERNO CUBANO

Comparte esta noticia

Por Albert Fonse ()

Miami.- ¿Sabías que Estados Unidos tiene bases legales para desconocer al régimen cubano como gobierno legítimo?

La Doctrina Stimson, proclamada en 1932 por el Secretario de Estado Henry L. Stimson, establece que Estados Unidos no reconocerá situaciones territoriales ni gobiernos surgidos mediante la fuerza, el fraude o la violación del derecho internacional. Aplicada a lo largo del siglo XX, este principio ha guiado la política exterior estadounidense en defensa de la legalidad y la autodeterminación de los pueblos.

Hoy, la situación cubana encaja perfectamente en los supuestos previstos por esta doctrina. El régimen que gobierna en La Habana surgió de un proceso violento que suprimió el orden constitucional, eliminó los derechos fundamentales y mantiene su poder a través de la represión sistemática. En consecuencia, según el criterio de la Doctrina Stimson, Estados Unidos tiene base legal suficiente para desconocerlo como representante legítimo del pueblo cubano.

Este desconocimiento no se limitaría a romper relaciones diplomáticas, sino que implicaría considerar nulos todos los actos jurídicos emanados del régimen, incluyendo tratados bilaterales, acuerdos comerciales y reclamaciones de soberanía. A nivel internacional, se podría cuestionar su participación en organismos multilaterales, alegando que carece de la legitimidad necesaria para representar a Cuba ante la comunidad internacional.

Los antecedentes

Además, Estados Unidos tendría la capacidad de reconocer a una autoridad alternativa que encarne la verdadera soberanía popular cubana, ya sea un gobierno en el exilio o una fuerza de transición democrática. Esto permitiría canalizar apoyo político y económico legítimo, gestionar activos congelados y establecer relaciones basadas en la legalidad internacional, sin necesidad de validar al aparato comunista.

Esta estrategia se sostiene en precedentes históricos claros. Durante la Segunda Guerra Mundial, Estados Unidos se negó a reconocer la anexión soviética de los países bálticos, manteniendo relaciones diplomáticas con sus gobiernos en el exilio. De manera similar, desconoció la creación del Estado de Manchukuo en Manchuria bajo ocupación japonesa, reafirmando que la fuerza no puede engendrar legitimidad.

Aplicar la Doctrina Stimson a Cuba permitiría tratar a la isla como un territorio bajo ocupación ilegítima y actuar en el plano diplomático, económico y jurídico para restaurar el orden constitucional. No sería una medida arbitraria, sino un acto de coherencia con los principios históricos que han guiado la defensa de la libertad y la soberanía popular en la política exterior de Estados Unidos.

Deja un comentario