Por Yolanda Molina Pérez
Pinar del Río.- Sonia es una de las maestras que resultó beneficiada con el incremento salarial a los trabajadores del sector hace un año, ella decidió, a pesar de las necesidades sin cubrir e imponiéndose sacrificios, ahorrar una parte de su dinero para comprar una lavadora automática.
Lleva 12 meses acumulando entre 10 y 15 MLC (moneda libremente convertible), por estos días se pregunta constantemente si sus peculios valdrán la pena y es que a partir de que en las distintas plataformas de las redes sociales se ha dado a conocer que abrió una tienda en La Habana, donde las tarjetas de las sucursales bancarias (BPA, Metropolitano y Bandec) no tienen capacidad de compra tiene la duda anclada en sus pensamientos.
Si vende los 150 MLC de su saldo contable, para transformarlos en dólares, todo ello en el mercado informal, pierde alrededor de 35 de los primeros, se van por la borda 90 días de austeridad, pero ni siquiera sabe si será lo acertado, teme no actuar y que luego la merma del capital sea mayor, de igual manera le aterra hacerlo y que sea innecesario.
Es cierto que en las últimas sesiones de la Asamblea Nacional del Poder Popular (ANPP) se anunció la dolarización parcial de la economía, pero en ningún momento se mencionó reducir el poder adquisitivo de esta moneda virtual, cuya circulación, está respaldada por depósitos de divisas en cualquiera de los bancos antes mencionados.
Fueron muchos los cubanos que vieron menguar sus reservas monetarias al eliminarse el CUC, también creado con valor equiparado al dólar, y convertido en 24 cup; cambio realizado, además, en un momento de desabastecimiento de la red comercial y un proceso inflacionario en marcha que ya se vaticinaba vertiginoso.
Entre los más perjudicados en aquel entonces estuvieron los colaboradores, significó la evaporización de años de trabajo con fines concretos como adquirir una vivienda, realizar obras constructivas en la que poseían…, entre otras proyecciones que se sustentaban sobre ese pago en divisas que recibían por sus servicios en otras naciones.
No fueron los únicos, también se dañaron aquellos que apostaron por ahorrar en divisas porque tenía más valor y poder adquisitivo, incluso ancianos que creían aseguraban su vejez con algunos miles de estos llamados “chavitos”, perdieron el respaldo económico que previeron.
Ejemplos hay muchos y cada quien puede citar varios de su propio entorno, ese recuerdo junto a la falta de información (por canales oficiales e instituciones responsables) y la limitación del uso de las tarjetas en MLC crea desconfianza e incertidumbre en la población.
Sigue fresco en la memoria que cuando apareció el MLC se explicó ampliamente que sólo sería para el expendio de artículos de alta gama y que se revertiría en la red interna, algo que sabemos no sucedió; ni siquiera nivel de canasta familiar normada, que cada vez tiene menos surtidos y más impuntualidades, alcanzando hasta aquellos productos sacrosantos por décadas como la leche para los niños.
El vacío generado por la desinformación no ayuda a la “comprensión” de estas disposiciones, que vuelven a poner en tela de juicio la pertinencia de la unificación monetaria asociada a la tarea ordenamiento.
Funcionarios y directivos de instituciones que deberían rectorar la implementación de medidas en la provincia que impliquen una salida de circulación del MLC o su cambio, aseveraron a Guerrillero que carecen de indicaciones al respecto, mientras que la Delegación de Turismo aguarda por los detalles para incorporar el cobro en efectivo en USD en algunas de sus instituciones.
No obstante, aunque siga vigente el MLC, si prima el desabastecimiento en la red que tiene validez -como sucedió en tiempos del CUC- tendrá muerte natural.
De nada sirve una Ley que no se cumple, y la de Comunicación va dejando en claro que es sólo letra impresa; al margen de esto, parece innecesario añadir, a los problemas cotidianos, dudas que una entrevista o comparecencia podrían esclarecer; es muy difícil el día a día en nuestros hogares para complicarlos por escatimar unas palabras.
Este pueblo ha dado pruebas sobradas de inteligencia, fuerza y confianza, los productos que aparecen en la tienda de nueva creación figuran entre los de mayor demanda, aunque sólo pueden adquirirlos quienes poseen el MLC, a ojos vistas no es un mercado para turistas, que en ese caso seguro a nadie se le ocurriría dar el vuelto en caramelos, vergonzoso, pero cierto.
Es válido el cuestionamiento social que desde las redes sociales se suscitó y se precisa que, con prontitud, se ofrezcan las aclaraciones pertinentes, lo que sin duda ayudaría a Sonia, y a los que, como ella, deben tomar decisiones sobre sus finanzas sepan de qué manera obrar.