Irán Capote
Pinar del Río.- Y de pronto me encuentro esta foto de cuando llegaron los “fríos” nuevos, con aquella lucecita blanca en su interior, con aquella pintura buena que años después era una costra de óxido.
¡Qué tiempos aquellos en los que creíamos que sí, que estábamos haciendo una verdadera Revolución Energética y que entregando la artillería rusa para endeudarnos por diez años en el pago de los “fríos nuevos”, estábamos avanzando hacia el verdadero comunismo…
Ya pagamos la deuda. Y ahora no tenemos ni refrigerador ruso, ni “frío nuevo”, ni energía.
Esta es nuestra canción del Perrito Chino…
Lo que sí valió la pena fue coger el cartón de las cajas para poner debajo de los colchones.
