Redacción Internacional
Washington.- El presidente Joe Biden dijo el miércoles que abandonar su campaña de reelección y respaldar a su vicepresidenta, Kamala Harris, como candidata demócrata era la mejor manera de unir al país y salvar la democracia, a pesar de su ambición de ganar un segundo mandato.
El anuncio de Biden de poner fin a su campaña presidencial el domingo siguió a un desastroso debate en junio con Donald Trump, que exacerbó las preguntas sobre su capacidad para derrotar al candidato republicano o para cumplir otros cuatro años si tenía éxito.
En su discurso a la nación desde la Oficina Oval, el presidente de 81 años dijo que creía que merecía ser reelegido basándose en su historial durante su primer mandato.
«Pero nada, nada puede impedir que salvemos nuestra democracia. Eso incluye la ambición personal», afirmó. «Por eso decidí que la mejor manera de avanzar es pasar la antorcha a una nueva generación. Esa es la mejor manera de unir a nuestra nación».
En una publicación en su plataforma Truth Social, Trump dijo que el discurso fue «apenas comprensible y ¡muy malo!».
En los tres días transcurridos desde la decisión de Biden, Harris ha conseguido un amplio apoyo en todo el Partido Demócrata y ha revitalizado su campaña electoral. Harris, la primera mujer negra y asiático-estadounidense en ocupar el cargo de vicepresidenta, se convertiría en la primera mujer elegida presidenta si gana las elecciones el 5 de noviembre.
Biden elogió a Harris, de 59 años, como una líder fuerte que sería una presidenta eficaz.
«Tiene experiencia, es fuerte, es capaz. Ha sido una compañera increíble para mí y una líder para nuestro país. Ahora la decisión está en ustedes, el pueblo estadounidense», afirmó.
Horas antes, Trump había intentado frenar parte de ese impulso con un discurso agresivo en un acto de campaña, el primero desde que la aparición de Harris cambió la contienda. «Ella es una lunática de izquierda radical que destruirá nuestro país si alguna vez resulta elegida», dijo.
Trump suele insultar a sus oponentes y dejó en claro que planeaba ignorar el consejo de que adoptara una postura más suave. «¡No voy a ser amable!», le dijo a sus entusiastas seguidores en Charlotte, Carolina del Norte, un estado en disputa donde las preferencias electorales pueden oscilar hacia uno u otro lado.
El tono combativo de su discurso fue una fuerte señal de que nos esperaban tres meses de dura campaña.
En su primer mitin de campaña desde que Biden recibió su apoyo, Harris mostró el martes su voluntad de contraatacar, comparando su experiencia como fiscal con su historial como delincuente convicto.
«¿Queremos vivir en un país de libertad, compasión y estado de derecho, o en un país de caos, miedo y odio?», preguntó durante el discurso en Milwaukee.
En el mitin de Trump, el expresidente atacó a Harris como una fuerza impulsora de la administración Biden que debería rendir cuentas por sus políticas sobre inmigración y otros temas.
«Terminaré con todas y cada una de las políticas de apertura de fronteras de la administración Biden-Harris y sellaremos la frontera y detendremos la invasión de Kamala Harris sin demora», dijo.
Biden encargó a Harris trabajar con los países de América Central para ayudar a frenar la ola migratoria, pero no le dio la responsabilidad de la seguridad fronteriza ni la nombró “zar de la frontera”. También ha dicho que se opone a las fronteras abiertas.
‘PASA LA ANTORCHA’
Biden, quien durante semanas resistió la presión de sus compañeros demócratas para que se hiciera a un lado, dijo en su discurso que tenía la intención de centrarse en su trabajo como presidente en los seis meses que le quedan de mandato.
«Eso significa que seguiré reduciendo los costos para las familias trabajadoras y haciendo crecer nuestra economía. Seguiré defendiendo nuestras libertades personales y nuestros derechos civiles, desde el derecho a votar hasta el derecho a elegir», dijo, destacando algunos temas en torno a los cuales se espera que Harris construya su campaña.
El presidente regresó a Washington el martes por la tarde después de aislarse por COVID en su casa de Delaware, donde anunció que ponía fin a su campaña.
El comité de reglas del Comité Nacional Demócrata acordó el miércoles un plan para nominar formalmente a Harris tan pronto como el 1 de agosto, antes de la convención del partido del 19 al 22 de agosto en Chicago, y Harris elegirá un compañero de fórmula antes del 7 de agosto.
La campaña de Harris dijo el miércoles que ha recaudado 126 millones de dólares desde el domingo, y que el 64% de los donantes hicieron su primera contribución de la campaña de 2024.
Anteriormente, la vicepresidenta de 59 años convocó a una manifestación de más de 6.000 mujeres negras en Indianápolis para ayudarla a revitalizar la campaña demócrata.
Harris habló en un evento organizado por la hermandad Zeta Phi Beta, fundada en la Universidad Howard, la universidad históricamente negra a la que asistió. Espera aprovechar la red multigeneracional de mujeres negras de las hermandades, que desempeñaron un papel importante en la victoria de Biden en 2020, para lograr una fuerte participación electoral para los demócratas nuevamente en noviembre.
«Les agradezco. Y ahora, en este momento, nuestra nación necesita su liderazgo una vez más», dijo Harris.
Harris y Trump están empatados, según mostraron las encuestas de opinión pública de esta semana.
Una encuesta de Reuters/Ipsos realizada el martes mostró que Harris tiene una ventaja marginal de dos puntos porcentuales sobre Trump, 44% a 42%. Una encuesta de CNN realizada por SSRS mostró que Trump lidera a Harris, 49% a 46%. Ambos resultados estaban dentro de los márgenes de error de las encuestas. (Reuters)
