Por Manuel Viera
La Habana.- Hubo varios momentos humorísticos en las recién finalizadas sesiones de la Asamblea Nacional, pero sin dudas uno de los mejores chistes socialistas que he escuchado en mi vida dice así:
Un turoperador me dijo una vez que si a nosotros de verdad nos hacía falta las divisas, porque estábamos perdiendo una cantidad enorme de monedas extranjeras al no aceptar pagos en efectivo en los hoteles.
O sea, al cabo de tres o cuatro años después de prohibir efectivo en los hoteles, se enteran en Francia de que están perdiendo dinero.
Hace falta que algún turoperador de Australia les diga que al no aceptar efectivo en las gasolineras y hacer tan engorroso el proceso, dejan de recoger una cantidad enorme de circulante, e incluso, les haga saber también que pierden millones de dólares en ventas por la pésima conectividad de Etecsa.
Es de lo más común llegar a cualquier establecimiento en Cuba a pagar y escuchar la frase «no tenemos conexión». Hace unos meses llevé a un mexicano a pagar una especialidad en medicina a la oficina de Asistencia al Turista (ASISTUR) y tuvo que ir tres veces. El viernes no trabajaron no sé por qué, el lunes no había conexión y el martes finalmente lo logró. Hablamos de miles de dólares.
Sin embargo, ahí no quedó la historia. De La Habana Vieja salimos a Playa para entregar el comprobante a la entidad del MINSAP que atiende el asunto y, cuando llegamos, estaba cerrado porque había apagón.
Un trámite que en unos minutos pudo haber generado miles de dólares, tomó cuatro días, mientras mi amigo mexicano estuvo a punto de perder la paciencia e ir a hacerse otorrinolaringólogo a Houston.
Por eso mismo, necesitamos turoperadores extranjeros que expliquen lo mal que funciona este cuento de terror en que vivimos. A ver si a ellos le hacen caso y no tengamos que seguir riéndonos de nuestras propias desgracias.
