Redacción Internacional
Wisconsin.- El presidente Joe Biden intentó el viernes sofocar un levantamiento entre algunos demócratas que lo presionaban para que abandonara su campaña de reelección, después de un pobre desempeño en el debate, prometiendo que «seguiré en la carrera».
En un apasionado discurso ante sus partidarios en Wisconsin y en una entrevista con ABC News , Biden argumentó que es el mejor candidato demócrata para evitar que el republicano Donald Trump recupere la Casa Blanca en las elecciones del 5 de noviembre.
La actuación vacilante de Biden en su debate con Trump el 27 de junio generó serias preocupaciones entre algunos demócratas sobre su agudeza mental y resistencia a los 81 años.
En el partido hay un movimiento en marcha para persuadirlo de que se haga a un lado, y los críticos advierten que se enfrenta a una derrota casi segura y que podría arrastrar a otros demócratas con él. Se espera que los demócratas de la Cámara de Representantes y un grupo de senadores se reúnan para tratar el tema cuando regresen a Washington la semana próxima.
Algunas encuestas de opinión pública han mostrado que Trump ha ampliado su ventaja desde el debate, y una encuesta de Reuters/Ipsos encontró que uno de cada tres demócratas quiere que Biden abandone la carrera. Biden rechazó el movimiento el viernes.
«Tuvimos un pequeño debate la semana pasada. No puedo decir que haya sido mi mejor actuación, pero desde entonces ha habido mucha especulación. ‘¿Qué va a hacer Joe? ¿Va a seguir en la carrera? ¿Va a abandonar?», dijo Biden. «Bueno, aquí está mi respuesta: me presentaré y volveré a ganar».
Biden utilizó una entrevista de 22 minutos con ABC News para argumentar nuevamente que simplemente tuvo una mala noche en el debate, pero que por lo demás estaba bien.
Bajo el persistente interrogatorio del entrevistador de ABC, George Stephanopoulos, Biden desestimó las encuestas que lo mostraban detrás de Trump y dijo que otras encuestas lo ubican en una mejor posición.
Cuando se le preguntó si se había sometido a una prueba cognitiva específica para un examen neurológico, Biden dijo que no se había hecho ninguna y que «nadie me dijo que tuviera que hacerlo». Los rigores de la Casa Blanca son suficientes, dijo.
En su último examen físico, realizado el 28 de febrero, se determinó que estaba apto para el servicio.
Biden agregó que era el mejor candidato para enfrentarse a Trump y que sólo «el Señor Todopoderoso» podría sacarlo de la carrera.
Los últimos esfuerzos de Biden para convencer a los demócratas de que lo apoyen fueron descartados por algunos, aunque parecía decidido a seguir luchando.
«Parece no poder comprender el hecho de que la gente tenga estas preguntas sobre él», dijo a CNN el estratega demócrata David Axelrod, ex asesor principal del presidente Barack Obama.
«Está bastante claro que no irá a ninguna parte a menos que haya una revuelta importante en el Capitolio», dijo a Reuters un alto funcionario del Comité Nacional Demócrata.
¿REBELIÓN EN LA COLINA?
Biden dijo a los periodistas que había hablado con al menos 20 legisladores y que le estaban diciendo que se quedara. Cuando se le preguntó sobre el pedido de Warner para que se fuera, Biden dijo: «Bueno, Mark Warner, según tengo entendido, es el único que lo está considerando».
En el mitin, Biden dijo que estaba agradecido por el apoyo de su vicepresidenta, Kamala Harris, quien ha surgido como la principal opción para reemplazarlo si él dejara de ser el abanderado del Partido Demócrata.
Una persona en el mitin de Madison levantó un cartel detrás de Biden que decía: «Pasa la antorcha, Joe».
Harris publicó una nota de apoyo en X después del mitin, diciendo que Biden había dedicado su vida a luchar por los estadounidenses. «En este momento, sé que todos estamos listos para luchar por él», dijo.
Pero el representante demócrata de Illinois, Mike Quigley, en MSNBC, pidió a Biden que se haga a un lado y «deje que alguien más haga esto» o se arriesgue a una «catástrofe total».
En sus apariciones del viernes, Biden criticó la inteligencia de Trump y lo llamó mentiroso, lanzando ataques mordaces que no hubo cuando apareció en el escenario del debate de Atlanta.
Pero tuvo palabras más duras para aquellos en su partido que dudan de su capacidad para llevarlos a la victoria el 5 de noviembre.
«Están tratando de sacarme de la carrera. Bueno, déjenme decir esto tan claramente como pueda: ¡sigo en la carrera! Derrotaré a Donald Trump. Lo volveré a derrotar en 2020», dijo Biden, equivocándose en el año. Continuó diciendo: «Y, por cierto, lo volveremos a hacer en 2024».
DONANTES, LÍDERES EMPRESARIALES, ALIADOS
Un puñado de donantes y líderes empresariales están manifestando abiertamente su descontento con la candidatura de Biden, suspendiendo la financiación o considerando posibles alternativas demócratas. Incluso algunos de los aliados políticos más cercanos a Biden, incluida la expresidenta de la Cámara de Representantes Nancy Pelosi, han planteado dudas sobre su salud.
La gobernadora de Massachusetts, Maura Healey, emitió un comunicado el viernes pidiendo a Biden que evalúe la decisión con cuidado, el raro gobernador demócrata que no ha emitido una declaración de apoyo en los últimos días.
«El presidente Biden salvó nuestra democracia en 2020 y ha hecho un trabajo extraordinario en los últimos cuatro años», afirmó. «La mejor manera de avanzar en este momento es que el presidente tome una decisión. En los próximos días, lo insto a que escuche al pueblo estadounidense y evalúe cuidadosamente si sigue siendo nuestra mejor esperanza para derrotar a Donald Trump».
La campaña de Trump y algunos de sus aliados han lanzado un ataque político preventivo contra Harris, moviéndose rápidamente para tratar de desacreditarla.
Trump, de 78 años, quien hizo múltiples declaraciones falsas durante el debate en Atlanta, afirmó falsamente en un video que circuló en las redes sociales que había expulsado a Biden de la carrera. Hizo comentarios despectivos sobre Harris en el mismo video, que la campaña de Trump mantuvo.
Un grupo de líderes empresariales y cívicos instó a Biden a poner fin a su intento de reelección en una carta a la Casa Blanca el viernes, un día después de que su director ejecutivo dijera que los miembros aún lo apoyarían si continuaba postulándose, informó el Washington Post.
El exjefe de gabinete de Biden, Ron Klain, quien dirigió el proceso de preparación antes del debate, respondió a las quejas de los donantes. «¡Somos el Partido Demócrata!», escribió en X. Los donantes «no pueden decidir derrocar a un presidente pro-trabajadores y pro-pueblo». (Reuters)
